Asfixia a su padre de 82 años en Móstoles

El parricida, de 43 años, declaró que mató hace unos días al anciano «por compasión»

Un hombre de 82 años apareció muerto ayer, presuntamente asfixiado por su hijo, de 43, en el 7º-B de la calle de Libertad número 41 de Móstoles. A las 12:30 de la mañana, el 091 recibió una llamada de Javier, el hijo de la víctima, confesando haber matado a su padre. Cuando los agentes llegaron al domicilio encontraron en una de las habitaciones el cuerpo sin vida del anciano. Por su parte, los servicios de Emergencias confirmaron su muerte y declararon que podría llevar muerto más de 48 horas. Según la Policía Nacional, el hombre mató a su padre «por compasión, para que no sufriera».

El anciano se encontraba en silla de ruedas y sufría desde hace tiempo alzheimer, una enfermedad mental progresiva que provoca pérdida de memoria, desorientación temporal y espacial y un gran deterioro intelectual y personal por lo que los vecinos aseguran que el hombre «no salía nunca de casa». Padre e hijo vivían solos en este piso de alquiler desde hace un año. El hijo tampoco era muy conocido por el vecindario: «salía lo justo y no hablaba demasiado con nadie, solo hola y adiós, era un hombre muy reservado», explicó una vecina del edificio.

Entre los vecinos de la zona cundió el desconcierto, no entienden como algo así ha podido ocurrir sin que nadie se haya dado cuenta. De hecho, una vecina del 7º, que comparte descansillo con los dos hombres, relata que vio a Javier hace dos días y al saludarle noto su cara «desencajada». Señala que esto le sorprendió mucho porque siempre era muy amable con ella. Ayer, cuando la policía estaba con Javier, una vecina le preguntó si ocurría algo y este, simplemente, le contestó «sí», con un semblante «muy serio y cabizbajo». Además, aseguró no haber oído nunca una discusión entre ellos, «lo único que escuchábamos era la televisión que siempre la tenía muy alta». Otra vecina, cuya ventana está enfrente de la del anciano, comentó que se quedó muy extrañada al no ver luces durante tres días en su habitación, ya que el hombre pasaba la mayoría del tiempo allí. Estos son los pocos testimonios que han dado los vecinos de la zona ya que la mayoría aseguró no conocerle o no haber entablado ninguna conversación con él.

Fuentes de la Jefatura Superior de Policía confirman que el hijo de la víctima no tiene ningún problema mental. Fue detenido, en su propio domicilio y actualmente se encuentra en los calabozos de la Policía Nacional, en Móstoles, a la espera de ser puesto a disposición judicial. El grupo VI de homicidios se ha hecho cargo de la investigación.