Una inversión de 3.000 millones se va con Jianlin

La marcha del empresario chino deja en el aire la «operación Campamento» y compromete el Parque Tecnológico de Parla.

Detrás de la operación del magnate chino Jianlin con el edificio de Plaza de España no sólo hay una inversión millonaria y la posible paralización de una de las obras más importantes previstas para la presente legislatura en Madrid. Fuentes consultadas por LA RAZÓN alertaron de que las decisiones de la primera fortuna china con respecto a sus negocios en España, y más concretamente en Madrid, podrían llevarse por delante millones de euros que varios empresarios asiáticos están, en este momento, interesados en gastarse en la Comunidad de Madrid. Las operaciones de la mayor fortuna de la segunda potencia económica mundial son seguidas de cerca por otros empresarios de este país que hasta ahora veían en España el lugar ideal para hacer negocio. Una posible retirada de Jianlin de Plaza de España podría hacer que cayeran como piezas de dominó otros de sus proyectos en nuestro país y los de muchos de sus compatriotas.

La «operación Campamento», en la que el empresario propietario del grupo Wanda estaría interesado en realizar una inversión de 3.000 millones de euros, es el más importante de ellos. El proyecto, que incluye la construcción de un macrocentro de ocio y viviendas en el desarrollo sur de la capital, podría suponer una de las mayores inversiones en la historia de Madrid y, como viene ocurriendo con la operación de Plaza de España, los rumores sobre su retirada han sido constantes en los últimos meses. Lo mismo ocurre con los terrenos de Alcorcón en los que el empresario estadounidense Sheldon Adelson quiso levantar su «Eurovegas» y en el que ahora Jianlin estaría también interesado en crear otro centro de ocio. Un plan que está mucho más en el aire que los anteriores.

Estos tres proyectos no son los únicos que están en manos de asiáticos en la actualidad. Muy cerca del «China Town» madrileño de Cobo Calleja, en Parla, varias delegaciones de empresarios chinos han fijado su vista en 1,8 millones de metros cuadrados de terrenos sobre los que prevén levantar naves en las que quieren abrir naves de venta de productos tecnológicos al por mayor. El Parque Tecnológico de Parla podría sumar a las arcas de este consistorio, sólo en licencias municipales, más de cien millones de euros.

El año pasado las inversiones chinas en nuestro país superaron los 600 millones de euros y la previsión de las agencias económicas es que estas cifras se amplíen en 2016. Siempre, eso sí, que los empresarios vean un camino más o menos fácil para realizar sus negocios.