Los empleados de Roca pasan la Nochevieja en la Catedral como protesta

Los trabajadores de la factoría de Roca en Alcalá de Guadaíra que el lunes se encerraron en la Catedral en contra del anunciado cierre de la planta alcalareña pasaron su primera noche en el templo «con mucho frío» y sin haberse comido las uvas con las campanadas para dar la bienvenida a 2013 porque consideran que «no hay ánimo de celebrar».

Así lo indicaron a Europa Press fuentes del comité de empresa, que explicaron que los trabajadores están haciendo turnos de unos 50 compañeros cada 24 horas para mantener este encierro, como mínimo, hasta mañana, cuando representantes de los trabajadores «acudirán a Madrid a dialogar con la dirección de la empresa» sobre el cierre de esta planta alcalareña que, según recuerdan, supone la extinción de 228 empleos en dicha factoría. Ése mismo día se decidirá el futuro de la movilización.