Agricultura

Madrid celebra el segundo año de la “Semana del tomate”

La unión de la Comunidad, IMIDRA, Acyre, Alcampo y agricultores madrileños apuesta por volver a las variedades tradicionales, autóctonas y de proximidad

Cocineros pertenecientes a Acyre junto a los agricultores participantes y representantes de Alcampo
Cocineros pertenecientes a Acyre junto a los agricultores participantes y representantes de AlcampoIMIDRASemana del Tomate

Por segundo año consecutivo tiene lugar la “Semana del tomate de Madrid”. Participan 23 restaurantes de la región, siete más que el pasado año, entre los que se encuentra un Estrella Michelín, dos establecimientos centenarios y una pastelería. La campaña dura entre el 20 y el 27 de julio, cuyo objetivo es impulsar el consumo de tomates locales, de circuito corto de comercialización y conectar la huerta madrileña con las mesas de los restaurantes de la región.

Investigadores del IMIDRA, después de 25 años de investigación y más de 60 años cultivando en la huerta de Madrid, ha producido este año un total de 600.000 plantas de hortícolas de las cuales 170.000 corresponden a seis variedades específicas de tomate. En los últimos tres años, la producción de estas plantaciones para su comercialización en la gran superficie ha pasado de 40.000 kilos a más de 60.000, lo que supone una grata noticia para el mundo de la agricultura, pues de las 2.000 hectáreas dedicadas a las hortícolas, el 10 % lo ocupa el cultivo de las variedades tradicionales, frente al 0,8 % de hace 5 años. Esto ha supuesto un cambio o, más bien, un retorno a las prácticas tradicionales, ya que de nuevo el consumidor vuelve a buscar la variedad, el sabor y el olor. Hasta hace poco y todavía ahora en grandes superficies, todos los tomates son iguales y “bonitos”, lo contrario a estas plantaciones en las que no están modificados ni mezclados.

Para aumentar la rentabilidad del sector agroalimentario de la capital, se han coordinado la administración regional, el Instituto Madrileño de Investigación y Desarrollo Rural, Agrario y Alimentario (IMIDRA), los agricultores, restauración madrileña como plataforma para dar a conocer los productos de calidad a través de la Asociación de Cocineros y Reposteros de Madrid (Acyre), y las grandes superficies alimentarias que operan en la región, como Alcampo. El origen de estas iniciativas relacionadas con la agricultura nace del “Plan Terra”, donde se agrupan 50 medidas relacionadas con “Madrid Rural”, para conectar en una plataforma logística a agricultores con grandes distribuciones y dotar de prestigio la huerta de Madrid y su producto de excelencia. Esto lleva un largo recorrido de trabajo detrás, de hecho, en IMIDRA han desarrollado bancos de germoplasma para guardar semillas, poder optar a la conservación genética y a una custodia de seguridad.

Los restaurantes que ofrecerán platos elaborados con estos tomates son: El Estrella Michelín que el chef Iván Muñoz tiene en Valdemoro, ‘Chirón’; centenarios como ‘La Ancha’, incorporado este año, o ‘Casa Alberto’, que lleva funcionando desde 1827; restaurantes con temática viajera como ‘Moemia Taberna Viajera’ y el recién renovado ‘La Posada del Nuncio’, todos en Madrid capital; o una pastelería ‘La Barra Dulce’, que ofrecerá fuera de carta una propuesta dulce a base de tomate. También en Madrid capital, los madrileños podrán disfrutar de platos con tomates en los siguientes restaurantes: ‘Makkila Príncipe de Vergara’, ‘Eumara’, ‘La Rita’, ‘Latasia casa de comidas’, ‘Taramara’, ‘Bistró Alcampo La Vaguada’, ‘Casino de Madrid’, ‘Picones de María’, ‘Atocha 107′, ‘Dantxari’, ‘El Fogón de Pedro’ y ‘Qubek’. En el caso de los establecimientos ubicados en municipios de la región, se pueden encontrar diferentes propuestas en ‘Bamba’, en Pozuelo de Alarcón; ‘La casa del Pregonero’, en Chinchón; el ‘Koma’, en el Box Art Hotel, en Collado Mediano y ‘Mesón Licinia’, de la bodega Licinia, en Morata de Tajuña.

Mitos y certezas

¿Cuánto sabes de tomate? Desde Quijorna y Velilla de San Antonio, los agricultores José Francisco y Félix prepararon el pasado miércoles una exposición y cata de tres variedades de tomate (Moruno, Gordo y Antiguo) para compartir su horizonte de lo bueno, lo sano y lo local. Allí han dado algunos consejos o “tips” para adquirir una educación sólida como consumidores. Tomen nota: Primero, los tomates que llamamos “feos”, rajados y con estrías forman parte de sus propiedades esenciales y de su propia maduración. Dichas características en absoluto se traducen en un mal estado de los mismos; Segundo: es óptimo esperar a la maduración de los tomates hasta que alcancen su color rojo natural gracias al licopeno, un carotenoide con numerosas propiedades nutritivas y antioxidantes; Y tercero: Los parámetros principales que se utilizan para juzgar un tomate pasan por el grado de acidez y dulzor, la firmeza (dureza), piel y apreciación global.