"Las cremas hay que combinarlas con otros tratamientos para lograr un claro efecto rejuvenecedor"

Eduardo López Bran, jefe del Servicio de Dermatología del Hospital Clínico  San Carlos de Madrid y director de la Clínica Imema

Por Eva S. Corada

Pregunta.- Muchas cosas han cambiado en los últimos años en el campo de la Dermatología, como que la alopecia ya no se hereda... ¿Qué le parece el fenómeno de trasplante capilar de Turquía?

Respuesta.- Un buen número de pacientes, atraídos por los bajos precios, han optado por esta opción en los últimos años. Parece que esta moda está decreciendo dado que las ofertas basadas en precios bajos no son de las clínicas más reputadas,  los costes de las tecnologías que se emplean se han ido abaratando con lo que los precios en España se han moderado y, por otro lado, diferentes publicaciones han recogido informaciones de un mayor número de complicaciones en los trasplantes capilares realizados en Turquía.

P.- Al margen de que los estándares de calidad varíen con respecto a los que se pueden aplicar aquí en España, ¿han hecho accesible un tratamiento que hasta hace no mucho poca gente se podía permitir?

R.- El hecho de que muchos personajes públicos de diferentes esferas (política, deporte, música…) hayan reconocido haberse sometido a un trasplante de pelo, ha contribuido mucho a su popularización. Todo ello añadido a los buenos resultados que se han obtenido en los trasplantes de pelo (debido fundamentalmente a la mejora de las técnicas y a la realización de los trasplantes por equipos experimentados), ha conllevado un aumento de la demanda. Además, la moderación en los costes ha permitido que personas que no podían realizarse este tipo de tratamientos para recuperar y rejuvenecer su imagen, hayan podido realizarse un trasplante.

P.- ¿Cuáles son las claves para que un trasplante capilar tenga éxito?

R.- Existen una serie de claves para conseguir trasplantes exitosos, entre otras: evaluar adecuadamente al paciente valorando el ratio entre su zona donante y la zona receptora; una adecuada extracción de las unidades foliculares, evitando destruirlas en la fase de extracción; un oportuno tratamiento postoperatorio, totalmente personalizado a las características y necesidades del paciente; o hacerlo en manos de un equipo profesional experimentado y que utilice la tecnología más avanzada.

P.- Muchas patologías de la piel en las que antes no había demasiadas opciones terapéuticas ahora están viviendo toda una revolución, como la psoriasis. ¿Se está dedicando más atención a este tipo de dolencias?

R.- Efectivamente, la Dermatología es una de las especialidades médico-quirúrgicas en las que ha habido mayores avances terapéuticos en los últimos años. Estamos viviendo una auténtica revolución en el tratamiento de enfermedades como, por ejemplo, la psoriasis, que es una de las que más afecta a la calidad de vida de los pacientes, ya que en los últimos años han visto la luz un gran número de tratamientos nuevos para esta patología. Estos nuevos tratamientos, conocidos bajo el nombre de biológicos, son capaces de corregir los brotes de psoriasis, distanciando mucho el tiempo de recidiva con una forma de aplicación muy fácil y cómoda para los pacientes. La industria farmacéutica y la investigación en general están dedicando muchos recursos a este tipo de enfermedades dermatológicas, que no sólo tienen una elevada incidencia en la población, sino que también tienen un gran impacto emocional en la calidad de vida de los pacientes

P.- El aumento de casos de melanoma va en paralelo con el de los avances en su tratamiento, como la inmunoterapia. ¿Llegaremos a curarlo?

R.- Indudablemente, los casos de melanoma han aumentado. Esto puede ser debido a que tengamos más herramientas para diagnosticarlos, como  la dermatoscopia, que no es más que una luz polarizada y una lente que nos permite visualizar los cambios que acontecen en las lesiones pigmentadas. Este mayor número de detecciones se acompaña de un mayor número de melanomas curados, porque mientras que el melanoma crezca radialmente y no inicie el crecimiento vertical, el tratamiento quirúrgico es curativo. La concienciación de la población de que podemos curar el melanoma, siempre que el diagnóstico sea precoz, hace que el paciente acuda más tempranamente al dermatólogo. En aquellos casos en los que ha habido una metastatización en órganos lejanos podemos celebrar que los avances en inmunoterapia (que valieron la concesión del Premio Nóbel de Medicina 2018 a dos investigadores cuyas aportaciones han cambiado al forma de tratar el cáncer en general y  han abierto una nueva era en el tratamiento del melanoma) hagan que estas terapias sean capaces de aumentar mucho la supervivencia de los pacientes con melanoma avanzado.

P.- Está claro que la prevención frente a las radiaciones solares es la clave para evitar el cáncer de piel, sin embargo, aún hay mucha gente que sigue sin aplicarse fotoprotector o comete errores de bulto al aplicárselo...

R.- El mejor tratamiento es la prevención para evitar las quemaduras, sobre todo en las etapas tempranas de la vida, en la infancia. Una fotoprotección adecuada es muy importante para evitar el cáncer de piel en las edades adultas, y por ello tendremos que insistir en algunas recomendaciones clásicas, como evitar la exposición en las horas centrales del día, aplicar el fotoprotector en cantidad suficiente y sin dejar ninguna zona sin cubrir, y al menos, media hora antes de exponerse a la radiación solar y renovar la aplicación después del baño o del ejercicio que conlleve sudoración intensa. El mejor consejo es que cuiden que protejan la piel, sobre todo la de nuestros jóvenes, la de nuestros niños.

P.- La vertiente estética del tratamiento de la piel despierta también mucho interés, cada vez más. Ahora que están en auge movimientos como los anti fakenews o salud sin bulos, ¿qué hay realmente de cierto en lo que nos prometen la gran mayoría de cremas antiarrugas o antiedad?

R.- La Dermatología, o la parte de ésta que se dedica u ocupa del tratamiento de la mejora estética de aquellos pacientes que, a pesar de no tener una enfermedad dermatológica, quieren mejorar el aspecto para su piel o para su pelo, ha despertado gran interés entre los dermatólogos para dar respuesta a las demandas de la sociedad actual. Los dermatólogos somos las manos amigas que con tratamientos sencillos, no invasivos, podemos devolver una imagen más joven, tanto en la piel como en el pelo. Hay muchos tratamientos dermatológicos-estéticos (toxina botulínica, ácido hialurónico, radiofrecuencia, láser, peelings, etc.) que, con muy poca agresividad permiten mejorar el aspecto estético de la piel. Dentro de este movimiento anti noticias falsas, anti fake news, sí es verdad que las cremas pueden mejorar el aspecto de nuestra piel, su hidratación, su luminosidad, e incluso disminuir o atenuar esas manchas que aparecen con el paso del tiempo debido al envejecimiento y al fotoenvejecimiento, pero difícilmente van a conseguir otros efectos. Por lo que es un buen momento para que, aprovechando este fuerte movimiento, podamos decir que las cremas hay que combinarlas con tratamientos como los anteriormente mencionados para lograr un claro efecto rejuvenecedor.

P.- Estamos en la moda Sin: parabenos, perfumes, gluten... Hubo una época en la que lo más era añadir aditivos de lo más variopintos: oro, caviar, diamante... ¿En qué hay que fijarse para comprar un buen producto dermocosmético?

R.- En estos casos, antes de aplicarse un producto lo mejor es asesorarse con los especialistas en piel, los dermatólogos, que nos ayudarán a ver más allá de la caja del producto, ya que los pacientes no suelen conocer realmente los ingredientes, ni si es realmente lo que necesitan o no. Los dermatólogos sí tenemos esa información y conocimiento y podemos interpretarlos para cada caso particular.