Internacional

Cuatro comas y un funeral

«En total, disfrutaron de seis días de juerga en este entorno protegido de lagos volcánicos»

Sin discotecas hasta el amanecer y tras los encierros por la pandemia de coronavirus, muchos jóvenes sienten que se les escapan sus mejores años. Han estado aguantando las ganas y ahora, a la mínima, explotan.

En el Lago Mezzano se ha organizado una rave que solo ha podido ser disuelta cuando los participantes finalmente se cansaron y se marcharon. La Policía local intentó negociar con ellos, pero solo subían aún más la música. Temieron un violento motín o incluso un incendio si entraban a las bravas. Los vecinos de este área fronteriza entre Toscana y Lazio pidieron detenciones –o que los bombardeasen (con agua) a través de aviones cisterna–. En total, disfrutaron de seis días de juerga en este entorno protegido de lagos volcánicos, al norte de Roma. No solo había italianos, acudieron jóvenes de toda Europa que no dudaron en aparcar momentáneamente su vida para darlo todo en esta polémica rave. Llegaron a juntarse unos 10.000 fiesteros. La mayoría se enteró gracias a la aplicación de mensajería de Telegram, pero una vez allí eso era el salvaje oeste. Sin infraestructuras, uno de los platos fuertes era la pizza de cannabis. Si ya no quedaba alojamiento, no importaba, consumían drogas para seguir de marcha o dormían en (o bajo) coches, caravanas o tiendas de campaña improvisadas.

El balance que han dado las autoridades es dramático. Una mujer dio a luz en plena fiesta ilegal; se han denunciado varias agresiones sexuales; al menos cuatro comas etílicos acabaron en el hospital; dos personas han sido ingresadas en estado de agitación; y un británico de 25 años residente en el norte de Italia fue hallado muerto en el lago. Asimismo, este fin de semana se han arrestado a varios traficantes de drogas que hicieron su agosto en la rave.

El viernes, tras el daño medioambiental y las posibles consecuencias sanitarias, Steffano Bigiotti, el alcalde de la cercana Valentano, cantó victoria: «Ya no queda nadie en el área. Solo puedo expresar satisfacción». Bigiotti también anunció que arrancaban las tareas de limpieza de la enorme cantidad de basura generada en esta fiesta ilegal que comenzó la madrugada del 15 de agosto. Por fin, «la zona ha sido liberada».