Política

Pelé y los demás

A falta de certezas, ojalá 2023 derroche sensatez entre todos esos que deciden por nosotros

A 2023 le pido salud a raudales, salud luminosa para los míos. Salud siempre para ti, que me lees, y que podamos superar los desafíos que se nos presenten en nuestras respectivas vidas. Ver a mi hijo cumplir los 18 años… Todo lo demás –amor, prosperidad– es muy deseable, por supuesto, pero no lo más imprescindible.

Que se lo digan a los seres queridos de quienes nos dejaron este año. Entre los ilustres, el maestro de las letras Javier Marías, el animal televisivo Jesús Quintero, José Luis Balbín, Olivia Newton-John, Kirstie Alley, Angela Lansbury, Juan Diego, Paco Gento, Pablo Milanés, Gorbachov….

Finalizó una era con Isabel II, la reina más longeva, cuyo funeral fue seguido por 4.000 millones de personas, la mitad de la Humanidad. Y ahora nos conmueve el final del astro Pelé, –sin duda, el mejor futbolista de todos los tiempos– y la lenta agonía de Benedicto XVI, ese Papa que nos trajo a la primera línea coloquial el concepto «emérito» y que se retiró sin hacer ruido ni sombra a Francisco. El primero en pedir perdón por los abusos de la Iglesia.

Cuesta resumir un año tan convulso en unas pocas líneas. Por aquí, en lo político, la crispación y la crisis institucional han sido las notas dominantes, con escenas nunca vistas en nuestro hemiciclo, por chabacanas. Con reformas del Código Penal a la medida de los socios de un Gobierno de dos almas, frente a una oposición confiada en el cambio político que traerán las próximas generales (vete a saber, en esta España apática y de flaca memoria).

En lo económico, a pesar de que cerramos 2022 con la inflación más baja de la Unión Europea, somos todos más pobres. La cesta de la compra se ha encarecido un 15,5%. Llenar el depósito nos cuesta un 24% más que a principios de 2022 y es evidente el frenazo en la creación de empleo.

En lo social, éste ha sido el año del colapso sanitario por la escasez de profesionales y porque, aquellos que no han emigrado, se quejan del salario. La violencia de género repunta, ¿alguien me explica por qué? Han fracasado todas las medidas para acabar con esta lacra, y mientras varios ministros socialistas lo reconocen, en Podemos siguen erre que erre, convencidas de que sus leyes protegen a las mujeres. He perdido ya la cuenta del número de excarcelados y de agresores con condenas rebajadas por culpa de la ley del solo sí es sí.

A todo esto, ¿se saldrá ERC con la suya y habrá referéndum en Cataluña? ¿Qué pasará con el coronavirus en China? ¿Tenemos que volver a preocuparnos? ¿Cuándo acabará la guerra que nos tiene a todos en vilo? A falta de certezas, ojalá 2023 derroche sensatez entre todos esos que deciden por nosotros.