Carita de dolorosa

Esta semana hay unanimidad en las portadas de las revistas del corazón: Paula Echevarría, de protagonista, y ventanas para David Bustamante, donde, aunque no hay todavía comunicados de la pareja, se da por hecho el final del matrimonio. «¡Hola!», siempre gran señorona de estos territorios, nos muestra en exclusiva fotos de Paula. La de la portada es la que da título a este artículo, porque, efectivamente, la actriz está con carita de Dolorosa, que en las fechas que estamos es estar al día. Las razones son variadas: que si a él le gusta salir y divertirse con amigos, al contrario que ella, que es muy casera; algunos incluso afirman que hace tres años que la pareja firmó ante un notario una pre-ruptura. De ser así, seguir llevando una vida de pareja «very happy» debe ser muy agotador. Pero hay quien llega más lejos: el acuerdo era seguir con esa vida de pareja y si alguien aparecía en la vida de alguno, sería el momento de hacer pública la ruptura. No me extrañaría, yo he conocido a alguna pareja muy conocida que optó por esa misma solución.

Pero, para pareja total, la que componen Isabel y Mario, después de celebrar el cumpleaños el añoso galán, se fueron cuesta arriba hasta llegar al mismísimo Machu-Picchu. En el intrincado camino, Isabel se quedó atrás y, mirando a su amado, le salió la mujer bravía que lleva dentro y le gritó, eso sí, con voz de soprano ligera, qué Machu y qué Picchu, cerrando con vivas a España, Filipinas, Perú y Porcelanosa.

Una pareja que comienza su andadura la componen la hasta hace poco compungida Alba Carrillo y el ingeniero David Vallespín. Con suerte duran hasta que llegue septiembre, que el verano da mucho juego en esto de los reportajes de jóvenes enamorados, playas, barcos, fiestas... El otoño siempre pasa un control sobre estos romances.