Creencias

En este país nuestro se han instalado dos creencias de nuevo cuño: que hay más dinero escamoteado al fisco fuera de nuestras fronteras que euros en las arcas públicas, y que la mayoría de las mujeres vivimos en la inopia. A la primera le está intentando poner remedio Rajoy con su viaje a Andorra, que es ese país en el que Pujol ha conseguido repetir el milagro de los panes y los peces con la herencia de su padre, y la segunda ha sido debidamente corroborada por Tania Sánchez, que fíjense por dónde, ya tiene algo en común con Ana Mato y con Cristina de Borbón además de la melena.

Por lo que se refiere al Presidente del Gobierno, se ha vuelto del coqueto principado vecino con un convenio para evitar que una misma persona sea gravada en los dos países por una misma renta o por un mismo bien, y con el compromiso de su presidente de seguir trabajando para agilizar el intercambio automático de información fiscal entre los dos países. Eso sí, Antoni Martí, hombre reposado en cuyo carácter no está por lo visto, salir disparado del sillón para darle un meneo al calendario, ha fijado el fin de obra para 2018, que no es precisamente de hoy para mañana, pero que por lo menos servirá para que los «pujoles» del futuro no puedan pasar en pijama y zapatillas de un lado a otro de la frontera con el maletero convertido en una caja registradora.

En cuanto a lo Tania Sánchez, sospecho que no tiene remedio. A este paso, y gracias a la proliferación de mujeres que parecen algo pero a las que, por lo visto, les engañan maridos, hermanos y si se tercia hasta sus mascotas, a lo que vamos a terminar exponiéndonos es a que se elimine el sufragio femenino. Y luego pretenden que alguien les vote, ya ven.