Angel del Río

De corte antisistema

La Razón
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Este gobierno municipal de nuestros pecados urbanitas ha hecho del Ayuntamiento un lugar donde se celebran espectáculos cada dos por tres, preferentemente de sesión continua los días de pleno, como el de ayer. Esto se parece muchas veces más a un circo que a un hemiciclo, donde las variedades sólo deberían ser las de las ideas. Pero, no, el espectáculo continúa y presenciamos actitudes de corte antisistema, que por otro lado es la génesis de muchos de los que hoy tienen responsabilidades de gobierno, como que la alcaldesa, en pleno fragor de la sesión, abandone el pleno, para dar una rueda de prensa sobre lo que en el interior se está debatiendo, y restar protagonismo a las intervenciones de los grupos de la oposición.

Pues empieza bien el proyecto de oficina antifraude. Empieza defraudando a la oposición, que recibe el documento dentro del plazo legal, pero fuera del tiempo razonable para poder estudiarlo y después debatirlo. La oposición, PP y Ciudadanos, porque PSOE es cada vez más punto de apoyo para el gobierno municipal, se lamenta, y más cuando la alcaldesa se larga para contar a los periodistas este ambicioso proyecto. Esperanza Aguirre y sus concejales del PP se marchan detrás, con la curiosidad del informador, para enterarse de lo que sucede en esa rueda de prensa y denunciar que actuaciones de este tipo no tienen precedentes y es una falta de respeto. La alcaldesa reconoce que la lideresa de la oposición está sobrada de razones para el enfado. Carmena pide perdón, petición que repite con frecuencia por culpa de sus iniciativas no meditadas, que evidencian una desconocimiento de la vida municipal, acompañada de la ausencia de colaboradores que la aconsejen adecuadamente.

Para ponerle más picante a la salsa municipal de ayer, el concejal del PP, Percival Manglano, llamó «Rita la trolera» a la portavoz municipal. De esta manera se verificaba el primer espectáculo de la temporada primavera-verano. Y a todo esto, mientras el circo avanza, los grandes problemas de Madrid siguen sin resolverse.