Cine

Cine

El doblaje en español

La Razón
La RazónLa Razón

España tiene una larga tradición de dobladores de películas al español, apuntalada por las voces radiofónicas de las escuelas de Madrid y Barcelona, de donde surgieron grandes actores fogueados en las radionovelas de los años 50 y 60. Hoy, la tradición sigue vigente. Hasta el punto de que si hay un doblador cuya voz que todo el mundo reconoce en cuanto comienza la película o la serie televisiva es Constantino Romero.

La fama le llegó con JR de «Dallas», personaje inconfundible de finales de los 70, y la consolidó con Lord Darth Vader, otro malvado universal, Némesis de Luke Skywalker en la saga de «La guerra de las galaxias», a quien dice: «Luke, yo soy tu padre». Su voz, de una profunda gravedad, era perfecta para doblar a duros como Clint Eastwood y Arnold Schwarzenegger, inconfundible con aquel «¡Sayonara, baby!» de «Terminator 2» (1991).

Tan reconocible pero más difícil de identificar al actor es la voz española de Homer Simpson. Genial interpretación de Carlos Revilla, que adaptó al castellano y le prestó su voz entre 1989 y 2000. Posteriormente fue sustituido por Carlos Ysbert, la inconfundible voz de Tony Soprano. La carrera de Revilla es tan longeva que cualquier oído afinado puede reconocerlo en actores tan carismáticos como Cary Grant, James Stewart, Michael Caine, Jack Lemmon, Humphrey Bogart, Rock Hudson y Groucho Marx, además de la voz de KITT en «El coche fantástico».

Un fenómeno reciente es el de Sheldon Cooper, de «Big Bang», doblado por Fernando Cabrera. La expresión más popular, después de «mosquis» de Homer, es «un zas en toda la boca», creativa traducción libre del «bazinga!» inglés.

Si hay unos rasgos que unen la época histórica del doblaje, desde su implantación en 1932, durante la Segunda República, y se afianzó en 1941 con la Ley de Defensa del Idioma de Mussolini, que permitía la censura, como pudo verse en «Mogambo» (1953), convertir a un matrimonio adúltero en unos incestuosos hermanos, es la perfección del doblaje español.

Dos espléndidas voces femeninas actuales son las de Nuria Mediavilla, que dobla a Cameron Diaz y Uma Thurman, y Nuria Trífol, sensual y delicada voz de Scarlett Johansson y Natalie Portman. Su frase más recordada es «No toleraré una actuación que nos conduzca a la guerra», de la princesa Amidala, en «La amenaza fantasma» (1999).

No es extraño que los actores españoles odien el doblaje y a sus dobladores, por sus voces perfectas y su armónica dicción. De ahí que, para grandes producciones animadas, se recurre a los «Star-Talent», personajes famosos como Santiago Segura, Alaska, Mario Vaquerizo, Antonio Banderas, Florentino Fernández y Anabel Alonso, que prestan su voz y popularidad a personajes de «Shrek», «Kung Fu Panda» y «Buscando a Nemo».