Jorge Urosa

El mismo rasero

Parece que a la señora Ada Colau no la gusta que le apliquen el mismo tipo de medicina que ella cree tener derecho aplicar a todo aquel que, según ella, es culable de todos los males del mundo, entre los cuales se encuentran todos los diputados y cargos electos del PP. Curiosamente esa responsabilidad nunca se traslada a los representantes del PSOE, ni de otros grupos políticos. Los escraches acosan, amenazan, insultan y sobre todo invaden sin ningún pudor la vidad privada de los responsables públicos. De este acoso, quizá quién más sepa sea la Delegada del Gobierno, Cristina Cifuentes, quien ha recibido todo tipo de amenazas y coacciones. Curiosamente la señora Cifuentes ha sido demandada, por la gurú de los desahucios,la misma que llamó ladrones a banqueros y políticos en sede parlamentaria, la que ha asimilado la actuación del sistema financiero español con la mafia y la que se ha dedicado a insultar a la señora Cifuentes día si y día tambien. Parece que ella puede insultar, amenazar y perseguir a quien quiera sin consecuencia alguna, pero que sobre ella no se puede hacer valoración alguna. La señora Colau considera que los politicos son una especie de pim pam pum a los que sacudir simplemente como desahogo y sin embargo, ella , «la portavoz del pueblo», la pepito grillo que agita las conciencias, la repartidora de legitimidades democraticas es, como el Tribuno de la Plebe en Roma , intocable.