Política

Toni Bolaño

El secuestro

El secuestro
El secuestrolarazon

Reconozco que Mas ha conseguido despistarme. No sé a quién nos parecemos porque si va a EEUU, Martin Luther King es nuestro referente. Si va a Israel, el pueblo judío y el catalán son primos hermanos. Si va a Europa, somos la Holanda del Sur. Ahora, como estamos en la India, Gandhi es el inspirador del proceso de transición nacional. O algo me he perdido en estos años, o es la primera vez que Gandhi es nombrado por el presidente de la Generalitat. Tan referente es, que Mas tenía prevista una reunión con su bisnieto. Prevista estaba pero ha sido cancelada. El motivo alegado por el familiar de Gandhi es que tenía un acto político. Una vez más se ha pasado la línea del ridículo y se ha caído en el provincianismo. Me gustaría saber quién le hace las agendas al presidente porque cuenta en sus viajes con tantos encuentros como cancelaciones. Artur Mas debería saber que si va a estrechar lazos comerciales no debería jugar a aprendiz de brujo intentando hacer política. Alguien debería decirle que no es ni Obama, ni Merkel, por ejemplo porque Cataluña no es el ombligo del mundo, por mucho que él se lo crea.

Con las calabazas en la maleta, el presidente ha recibido dos noticias. La buena. El gobierno cederá a las autonomías el impuesto bancario. Con los números en la mano ha hecho su promesa. Si nos pagan, pagaremos la extra de los funcionarios. Como si la paga fuera una prebenda. Es salario, no es del gobierno y es de los trabajadores públicos. La mala. La Asamblea Nacional Catalana exige consulta antes del 31 de mayo y pregunta «independencia sí o no». Mas se ha puesto serio. Ha criado cuervos y ahora le sacan los ojos, como dice el refrán. Ha hecho crecer tanto a la ANC, que ahora la musa del secesionista, Carme Forcadell, se cree con derecho de pernada, con derecho a imponer aunque no pase por las urnas. No en vano se cree que es la líder del país. La culpa no es suya es de Mas que ahora no sabe como cortarle las alas. Por cierto, la pregunta en el alero. Volviendo a Gandhi. Además de citarlo, leerlo no es malo. Ahí va una de sus frases célebres. «Un error no se convierte en verdad por el hecho de que todo el mundo crea en él». Pues eso es lo que tiene en la maleta, president.