Macron contra el populismo «Made in France»

La candidata del Frente Nacional, Marine Le Pen, abrió ayer la campaña para las presidenciales con un acto que podría haber firmado de principio a fin el nuevo presidente de EE UU. Del «America first» al «Made in France» no hay apenas diferencias. Las mismas recetas sencillas para arreglar problemas complejos y el mismo mensaje «patriota». En el caso de Donald Trump la mala suerte ya está echada, pero Francia aún puede escapar a un Gobierno populista que pretende hacer retroceder al país a otro siglo con la salida del euro o el abandono de la zona Schengen, por poner dos ejemplos. Con el candidato de la derecha, François Fillon, fuera de juego tras el escándalo del empleo ficticio y millonario de su esposa, Emmanuel Macron parece el hombre destinado a salvar a Francia de la ultraderecha. Todo apunta a que Le Pen y el ex ministro de Economía se verán las caras en la segunda vuelta, donde los sondeos dan por ganador a Macron. Sin embargo, visto lo ocurrido en los referendos de Colombia y Reino Unido y en las elecciones estadounidenses, conviene no dar nada por sentado. Macron tiene hasta mayo para seducir al electorado de centro-derecha que deja huérfano Fillon y también a una gran parte de los franceses que se sienten desilusionados por el «establishment» y que pueden ver en este independiente liberal el líder que necesitan para enderezar el rumbo.