Real Madrid

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Prescindibles

La Razón
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El Barça golea al Sporting sin Messi (0-5), luego Messi, aunque necesario, no es imprescindible. Ni siquiera Cristiano Ronaldo es la salsa de todos los guisos, aunque solucione partidos con un disparo desde fuera del área en medio de un atasco colosal y sin más aparición que la determinante. Portugal ha ganado su primera Copa de Europa sin él en los instantes cruciales; es un dato. Como lo es que en su enésima biografía, Mourinho revela que Florentino le llamó para suceder a Ancelotti con encargos precisos: Casillas, Pepe, Ramos y Marcelo, a la calle. El Madrid lo ha desmentido y hace bien; «Mou» no se ha mostrado precisamente agradecido con el club que tanto le dio y al que correspondió con más conflictos que títulos.

Pero ése es otro cantar y ni en la letra ni en la música se alude a Ronaldo, que terminó hasta la coronilla de su paisano. El caso es que Cristiano y Leo, ambos futbolistas extraordinarios y que cada quien coloque en la mesilla la foto del que más le guste, son importantísimos, pero no por norma trascendentales. En este sentido, las ausencias de Marcelo y Casemiro en el Insular despertaban más inquietud entre la parroquia madridista que algunas de «CR». Casemiro es el equilibrio, socorrista de emergencia, y Marcelo, el desatascador, un lateral con vocación de delantero, pesadilla de cualquier retaguardia. Asensio y Nacho cubrieron las vacantes y fabricaron el 0-1. Luego empató el Las Palmas, que juega bonito, con más posesión que el Madrid, y Araujo equilibró el tanto de Benzema. Cristiano fue prescindible; ¿Casemiro y Marcelo?, quizá no.