César Lumbreras
¡Semana de vértigo!
Hay vértigo en el interior. La semana termina con el PP sitiado por los casos de corrupción, dando una imagen de aparente unidad que no se corresponde con la realidad. También, con una parte del PSOE intentando colocar a Sánchez en La Moncloa y las calculadoras echando humo sin parar, mientras los barones miran para un lado y lo ven mal, pero se vuelven hacia el otro y lo ven peor. Con los de Ciudadanos ejerciendo de mediadores, aunque dada la velocidad a la que van los acontecimientos y las líneas rojas es tarea prácticamente imposible. Finalmente, los últimos siete días han sido de aúpa para los de Podemos y sus confluencias, que cada día son menos confluyentes. La impresión que transmiten es de confusión generalizada y no se sabe muy bien si buscan de verdad una salida al problema actual o todas sus actuaciones son un paripé, porque en lo que de verdad están ya es en campaña. Un ejemplo: no se entiende muy bien que Sánchez se dedique a reunirse con colectivos de diverso tipo (algo más propio de unas elecciones) en vez de hacerlo con los otros partidos, con documentos en la mano en la búsqueda de acuerdos.
También hay vértigo en el exterior: crisis financiera, tormenta monetaria, los chinos que no se aclaran, caída de las bolsas y un precio del petróleo anormalmente bajo. En la Unión Europea toca Cumbre la próxima semana con el «Brexit» y la crisis de los refugiados como asuntos centrales. En el primer caso parece haber coincidencia en «tragar» con las exigencias de los británicos, mientras que en el segundo las diferencias entre los estados miembros son muy profundas. Rajoy acude a esta cita con sus colegas como presidente en funciones y su posición muy debilitada. Evidentemente no es la mejor tarjeta de presentación para abordar dos problemas tan importantes. Lo que sucede en el interior nos pasa factura, y gorda, en el exterior. Cada día más.
✕
Accede a tu cuenta para comentar