Tiene Plan B

España tiene Plan B por mucho que se disimule. El gol que valió casi pasaporte para Brasil llegó de manera que podríamos considerar impropia, puesto que fue producto de una jugada que pertenece a otro tipo de juego. El centro de Monreal y el remate de Pedro es acción de contragolpe, de ocasión buscada desde una banda. Del centro que debe desempeñar un auténtico extremo. Navas, por ejemplo, que desde el momento en que apareció revolucionó el ataque. El error, a mi modo de ver, estuvo en contar con el extremo sevillista sabiendo qué se puede esperar de su juego y retirar a Villa, el auténtico delantero centro que podía aguardar sus pases. Para romper las barreras defensivas de los adversarios del equipo español no hay nada más productivo que ocupar las bandas. Desde la zaga, con un lateral que suba bien, papel que no desempeña Arbeloa, y un lateral izquierdo para el que se cuenta con Jordi Alba y se constató en París que también se puede depositar confianza en Monreal.

Tener a Villa tan desasistido sin nadie que potencie sus condiciones goleadoras, sin disponer de ocasiones de gol es coartada para justificar que nos va mejor con Cesc de falso nueve. La victoria se consiguió con el buen hacer de Xavi y Xabi, que dieron sentido al conjunto, las aportaciones de Víctor Valdés, salvador cuando tocaba, y la buena disposición general. Como siempre, con Iniesta en la creación del mejor fútbol de ataque y también, como de costumbre, con el oportunismo de Pedro.

Posdata. Sin renunciar al toque hay que dar alas.