Reino Unido

El acierto de no hacer el juego al separatismo

Ha sucedido en Reino Unido, pero el principio es válido también para nuestro país. El primer ministro británico, David Cameron, rechazó ayer participar en un debate televisivo sobre la independencia de Escocia solicitado por el ministro principal escocés, Alex Salmond, al considerarlo «una táctica de distracción». O lo que es igual, Cameron está decidido a marcar los tiempos, atenerse a las reglas y no entrar en el juego del enredo y la confusión de los independentistas. No ganaría nada. Son otros los que necesitan el ruido.