La beca hay que ganarla, además de necesitarla

La izquierda se rasga las vestiduras porque el ministro de Educación ha propuesto elevar a 6,5 la nota media para acceder a una beca universitaria, como si fuera un objetivo inalcanzable o supusiera un esfuerzo titánico para un estudiante. Lo que el PSOE quiere es que las becas se sigan dando sin vincularlas al esfuerzo académico, como subsidios a fondo perdido del que se aprovechan por igual los vagos y los que trabajan duro. Es ese igualitarismo de los mediocres el que ha llevado la enseñanza en España a los últimos puestos de la OCDE.