Sin Europa, Escocia se condena a la pobreza

Los escoceses, como los catalanes, tienen derecho a conocer la verdad, a que la realidad no aparezca difuminada o tergiversada. El Gobierno británico, que difundió su noveno documento de análisis sobre la eventual independencia de ese territorio, advirtió ayer de que una Escocia segregada tendrá que negociar su incorporación a la Unión Europea, al igual que lo hizo en su día Reino Unido. Está claro. El impacto para el nuevo Estado sería demoledor por empobrecedor. Perdería, por ejemplo, el llamado «cheque británico», que supondría 4.560 millones de euros hasta 2020, entre otras coberturas. El mensaje es claro y global: Reino Unido es más «fuerte» si permanece unido.