Carreteras

Una apuesta racional por la seguridad vial

El Gobierno aprobó ayer la reforma de la ley de tráfico, que aumenta a 130 km/h la velocidad máxima en tramos de autovía y autopista con seguridad manifiesta; duplica las sanciones por conducir bajo los efectos del alcohol y las drogas, e impone la obligatoriedad del casco para todos los ciclistas en vías interurbanas y, como mínimo, en menores de 18 años en vías urbanas. El proyecto del ministro Fernández Díaz, valorado positivamente por las asociaciones de conductores y de víctimas de tráfico, es una apuesta sensata por la seguridad vial y por la prevención. Que la Generalitat catalana se haya desmarcado prueba, una vez más, qué intereses defiende, que no son los de los ciudadanos.