Insensateces

Fetén

Yo veo a personas jóvenes que son un coñazo, unos viejunos, unos zombies que se idolatran por haber nacido en el año en el que han nacido y luego son pa matarlos de idiotas

Ha sido el cumpleaños de Mónica Carrillo, ilicitana, periodista y presentadora fetén. Ahora explico lo de fetén, porque hay términos que no se entienden pero que se han dado la vuelta. Mónica conduce el informativo del fin de semana en Antena3 y es una escritora magnífica. Tiene el Premio Azorín de Novela y varios premios por su carrera profesional en la tele. Me resulta extraño hasta tener que recordar quién es esta mujer fabulosa, afable y cercana. La conocí después del concierto de Nathy Peluso en la Calle Goya y me pareció maravillosa. Ayer fue su cumpleaños (felicidades, hermosa) y los comentarios eran del tipo «no es verdad que tengas esa edad». A mí me parece perfecto que una mujer se cuide, tenga buena naturaleza, una genética generosa, que coma bien, sano, que haga deporte. Todo eso es beneficioso para vivir mejor. Si tienes el físico de Mónica es doblemente satisfactorio. Pero que Mónica no vale por ser linda. No es un valor en sí mismo. Mónica vale por lo que vale. Mónica desprende madurez, alegría, rigor. Desprende profesionalidad y no necesita estar como una de treinta. Vamos a empezar a tratarnos como gente de nuestra edad, como que vivimos nuestro tiempo en todo tiempo y circunstancia. Como que podemos ser atractivos, interesantes e incluso guapos sin tener que parecer de treinta, como que no pasa nada si tenemos la edad que tenemos. Parecer más joven depende de muchas cosas y a veces no depende de uno mismo. Uno no elige su edad, ni su aspecto, ni su belleza. Uno puede trabajar un poquito por mejorar, pero lo mejor de cada uno de nosotros no es los años que podemos quitarnos. Lo mejor es ser singulares, únicos, imperfectos. Y a veces no representamos físicamente la edad que tenemos, pero igual sí. Igual resulta que tenemos la edad del DNI. ¿Cuál es el problema de empezar a ser lo que somos? Porque yo veo a personas jóvenes que son un coñazo, unos viejunos, unos zombies que se idolatran por haber nacido en el año en el que han nacido y luego son pa matarlos de idiotas. Mónica Carrillo es fantástica. Pero no por estar tan joven. Lo suyo viene más de su interior. De su enorme sonrisa.