Una preciosa historia interactiva

La interactividad ha supuesto el cambio más importante, evidente y significativo de la comunicación comercial de los últimos tiempos. Hoy día, conseguir la participación y una buena relación con los consumidores es absolutamente fundamental para el éxito de cualquier marca, y es algo que no debe limitarse a las redes sociales, sino a todas las acciones y mensajes comerciales. Claro que resulta complicado poner en marcha acciones realmente interactivas, pues más allá de las posibles dificultades técnicas para hacer cosas diferentes, se trata de experimentar con nuevos lenguajes y formas de comunicar. Algo que tiene mucho más riesgo, pero que también permite que de vez en cuando puedan aparecer sorprendentes campañas, como la de la agencia Wieden+Kennedy London para el lanzamiento del nuevo Honda Civic Type R.

«La otra cara» es un vídeo donde pueden verse dos historias radicalmente distintas que convergen en una sola: la primera tiene lugar por el día, y muestra a un tranquilo padre recogiendo a sus hijas del colegio con un Civic blanco para llevarlas a una fiesta sorpresa con todos sus amiguitos; la segunda sucede en escenarios similares pero por la noche, y en ella aparece el mismo protagonista como agente secreto infiltrado en una banda de ladrones de arte, y conduciendo un Honda Civic de color rojo vivo, en una aventura llena de velocidad y persecuciones.

Lo realmente innovador es que el mismo espectador es el que decide sobre la marcha qué historia quiere ver en cada momento, y puede ir cambiando continuamente de una a otra y hacer su propio montaje simplemente pulsando o soltando la tecla «R» de su ordenador. La película-anuncio cobra así vida de forma totalmente innovadora y personal, hasta el punto de que es raro no tener ganas de verla más de una vez para experimentar con ella. El vídeo se puede ver en el canal Honda España de YouTube, y es sin duda uno de los contenidos publicitarios más atractivos de los últimos tiempos, una de esas propuestas que difícilmente dejan indiferentes. Evidentemente no se basa sólo en una buena idea de la agencia, pues la realización también es impecable gracias a la dirección de Daniel Wolfe, uno de los creativos más premiados. Y la propia simplicidad del sistema es una de las claves de su éxito e impacto, pues el espectador pasa a ser el «director» del vídeo con pulsar la tecla R.