Rajoy se sumará a la misa solemne

El presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, ha anunciado hoy que el próximo martes viajará a Roma acompañando a los Príncipes de Asturias al acto de entronización del nuevo papa Francisco.

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, estará el martes junto a su esposa, Elvira Fernández, y los Príncipes de Asturias en Roma para la ceremonia de entronización del Papa Francisco. Así lo confirmó él mismo ayer desde Bruselas, donde participa en la Cumbre Europea de primavera junto al resto de líderes de la UE. En un principio, tal y como publicó este periódico, la presencia de Rajoy en el Vaticano no estaba prevista. Según fuentes gubernamentales, se decidió un cambio de planes al conocer la nacionalidad del Sumo Pontífice. Según declararon a LA RAZÓN las mismas fuentes, el hecho de que se trate de un Papa hispanoparlante, que estudió en España y con tantos lazos con nuestro país, justifica plenamente el viaje del presidente del Gobierno. «Conoce nuestro país y podemos estar todos muy satisfechos y muy contentos», dijo Rajoy desde la capital belga.

Al cierre de esta edición, La Moncloa no había desvelado la identidad del resto de políticos que integrarán la comitiva encabezada por los Príncipes de Asturias, al parecer bastante disputada. Se daba por hecha la asistencia del ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo, aunque todo iba a depender del número de personas invitadas por la Nunciatura, indicaron fuentes diplomáticas. A la entronización del Papa Benedicto XVI en 2005 no asistió el entonces presidente del Gobierno, Rodríguez Zapatero, pero sí lo hicieron el jefe de la Diplomacia, Miguel Ángel Moratinos, y el titular de Justicia y Asuntos Religiosos, Juan Fernando López-Aguilar.

En aquella ocasión presidieron la delegación los Reyes de España. Y este año la escena se habría repetido de no ser por la convalecencia del Rey, operado recientemente de una hernia discal.

Si en un principio se barajó que fuera la Reina la encargada de representar a España, finalmente serán los Príncipes de Asturias quienes lo hagan. Será la primera misa de inicio de pontificado a la que asistan, aunque no su primera «toma de contacto»: Juan Pablo II los recibió en audiencia en 2004 un mes después de su matrimonio, y en 2011 acudieron a su.

Hasta no conocerse el pasado miércoles la identidad del sucesor de Benedicto XVI no se tomó la decisión, ya que, entre otras cosas, la nacionalidad del nuevo Papa ha influido en la representación Real. Tal y como explican desde Zarzuela, el hecho de que Bergoglio sea hispano determina la presencia de Don Felipe: el heredero de la Corona tiene un papel institucional protagonista –dentro de la Familia Real– en Iberoamérica, ya que desde 1996 acude a todas las tomas de posesión de los presidentes electos. Por otro lado, el que sea el martes 19 la fecha de la entronización y no el domingo ha influido también, porque ese día Don Felipe recibirá a los miembros del COI. Y, principalmente, como heredero de la Corona, protocolariamente la presencia de Don Felipe tiene mayor peso institucional. La Misa comenzará a las 9:30, por lo que los Príncipes viajarán el día anterior y, como marca la tradición, acudirán a una cena que ofrecerá el embajador del Vaticano, Eduardo Gutiérrez Saénz de Buruaga, en el Palacio de España en Roma.