Restringido

Una imagen para la historia

Audiencia del Papa Juan XXIII al Episcopado polaco, celebrada el 8 de octubre de 1962. El primero por la izquierda, el entonces obispo auxiliar de Cracovia, Karol Wojtyla
Audiencia del Papa Juan XXIII al Episcopado polaco, celebrada el 8 de octubre de 1962. El primero por la izquierda, el entonces obispo auxiliar de Cracovia, Karol Wojtylalarazon

«L'Osservatore Romano» ofrece a los lectores de LA RAZÓN la única instantánea en la que aparecen juntos Juan Pablo II y Juan XXIII, que data de 1962. Artículos: Antonio Cañizares, Giovanni Maria Vian, Javier Echevarría, Paloma García Ovejero, Carlos Granados, José Gabriel Vera, Jesús Fonseca, Yago de la Cierva, Abel Hernández

«L'Osservatore Romano» ofrece a los lectores de LA RAZÓN la única instantánea en la que aparecen juntos Juan Pablo II y Juan XXIII, que data de 1962.

Pasear por una avenida de París sin saber muy bien qué es una JMJ. 1997. De repente, el «Papamóvil» irrumpe en escena. Visible sólo unos segundos. Sin margen para sacar la cámara. Un año después, en la plaza de San Pedro, aquel que pasó fugaz junto a la Madeleine proclamaba beato a un «hombre del pueblo y para el pueblo». Como él mismo también lo era. Emoción que rebrota hoy. Cuatro Vientos, 2003. «Un joven de 83 años». Lágrimas que no caducan. Imágenes de una memoria personal que se comparten en lo colectivo. Testigo directo de la fuerza de Wojtyla y lector asombrado de la mano izquierda de Roncalli. Imágenes para la historia de uno y de otro. Pero, ¿y juntos? Sólo una. Inédita. Gracias a «L'Osservatore Romano», los lectores de LA RAZÓN pueden ver a los dos compañeros en los altares en una audiencia al Episcopado polaco el 8 de octubre de 1962. El Papa del empuje conciliar, con su sonrisa empática. Casi fuera de plano, el entonces obispo auxiliar de Cracovia. Aquel año, Karol Wojtyla escribía al padre Pío para pedirle que intercediera por la recuperación de su amiga Wanda Poltawska. Milagro concecido. Por entonces, Juan XXIII recibía por primera vez en Roma a unos novios llamados Juan Carlos y Sofía. Wanda guarda todavía las fotos con su amigo. Los Reyes también conservan las suyas con los Pontífices. Fotografías de su intrahistoria frente a esta imagen para la historia.