Coronavirus

Por qué los contagios por coronavirus crecen tan rápido y cómo reducir la curva

Si no se cumple con la cuarentena de forma exhaustiva, los contagios continuarán y la pandemia se prolongará en el tiempo

Measures to contain coronavirus in Czech Republic
Prague (Czech Republic), 17/03/2020.- A man wears a mask as he sits in the metro in Prague, Czech Republic, 17 March 2020. According to media reports, the Czech government decided to impose a two-week quarantine in the country on the evening of 15 March, and ban all international travel from 16 March 2020. Currently 383 cases of the coronavirus SARS-CoV-2, which causes the Covid-19 disease, have been officially confirmed in Czech Republic. (República Checa, Praga) EFE/EPA/MARTIN DIVISEKMARTIN DIVISEKAgencia EFE

Desde que el coronavirus diera el salto a los humanos en Wuhan a finales de diciembre y comenzara a extenderse por el mundo, han sido muchas las dudas generadas en los gobiernos, que no han decidido tomar cartas en el asunto hasta que los contagios se han convertido en pandemia. En el caso de España, se ha pasado de incitar a la gente a acudir a las manifestaciones del 8-M en favor de la mujer a decretar el encierro en casa y que sólo se pueda salir en casos de extrema necesidad.

Para ver cómo se desarrolla el contagio en función de las medidas que se han tomado, el Washington Post ha publicado cuatro tipos de simulaciones, en las que se aprecia cómo se desarrolla un virus (similar al coronavirus), en el que cada vez que una persona interactuara con otra se contagiaría.

Modelo de desarrollo de un virus sin control
Modelo de desarrollo de un virus sin controllarazon

Las simulaciones, recogen la expansión del virus inventado “simulitis” en cuatro escenarios distintos. El primero de ellos es la libre circulación de personas y la no existencia de restricciones. En este caso, la mayoría de la población acabaría infectada y la curva de contagios comenzaría a disminuir a medida de que los contagiados comenzaran a recuperarse. Esta simulación es la que presenta una curva más acusada, pero en la que la incidencia del virus, medido en tiempo, es menor. En el caso del coronavirus, es la menos recomendable porque es la que mayor mortalidad presentaría.

Modelos dos: intento de cuarentena
Modelos dos: intento de cuarentenalarazon

El segundo escenario es la cuarentena forzosa, tal y como hizo el gobierno chino en la provincia de Hubei, zona cero de la enfermedad. La simulación demuestra que durante el periodo de cuarentena, se logra mantener a los infectados separados de los individuos sanos. esto provoca que los infectados, sigan expandiendo el virus entre las personas de su entorno. Así, cuando acaba la cuarentena, se vuelven a mezclar con los individuos sanos, por lo que al final, el virus acaba extendiéndose entre la población, aunque de una manera menos pronunciada pero más prolongada en el tiempo. Por lo que queda demostrado que es imposible aislar completamente a la población enferma de la sana.

Curva del modelo de distanciamiento moderado
Curva del modelo de distanciamiento moderadolarazon

El tercer modelo es el “distanciamiento social moderado”, el más similar al que se vive en España. En esta simulación, las autoridades sanitarias han pedido a la población que eviten reunirse en lugares públicos, que pasen más tiempo en casa y que guarden las distancias con otras personas. Si se reducen los desplazamientos y las interacciones, el virus tiene menos oportunidades de extenderse. Pero como está ocurriendo en España, algunas personas siguen saliendo a la calle. Unas por motivos laborales y otras obligaciones y otras porque simplemente han decidido desobedecer a las autoridades. Este grupo de personas son las más expuestas a enfermar y a expandir la enfermedad.

Si tres cuartas partes de la población se queda en casa, pero un cuarto sigue saliendo, la curva es mucho menos pronunciada pero el periodo de contagio se prolonga en el tiempo mucho más.

Gráfica del modelo de distanciamiento exhaustivo
Gráfica del modelo de distanciamiento exhaustivolarazon

Si el distanciamiento social pasa de moderado a exhaustivo -tal y como solicita el Gobierno español-, en el que se reduce la población que se mueve de un cuarto a un octavo, el número de contagios se reduce de forma exponencial y la curva es casi inexistente.