Con «TokApp School» hacer pellas será complicado

Hacer pellas sin que nadie se enterase era un clásico para los que crecimos en los años 80. Sin embargo, con el desarrollo de las tecnologías, cada vez resulta más complicado. Un buen ejemplo de ello es TokApp School, una aplicación impulsada por el empresario gallego Javier Romero que pretende mantener permanentemente conectados a profesores y centros educativos con padres y alumnos. La idea es que todos ellos intercambien información constantemente mediante mensajes instantáneos, de modo que el envío de circulares y comunicados en papel o por e-mail pase definitivamente a la historia.

Con la app, los padres sabrán inmediatamente si sus hijos han faltado a clase, si hay prevista una actividad para un determinado día o si se ha producido algún cambio de interés en el funcionamiento del centro. Por su parte, los colegios y docentes tendrán la seguridad de que estas comunicaciones han sido recibidas por los padres y alumnos, conociendo incluso la fecha y hora exactas en las que las han leído.

Una de las grandes diferencias de TokApp School respecto a otros servicios de mensajería instantánea es que sus comunicaciones tienen la misma validez legal que un burofax. Del mismo modo, la app garantiza la privacidad de los datos personales, de modo que no hay que indicar un número de teléfono para registrarse y, por tanto, nadie lo visualizará. Además, las respuestas a un mensaje sólo pueden ser leídas por el autor de dicho mensaje.

La herramienta permite incluir en las conversaciones fotografías, vídeos, documentos pdf y otros muchos archivos, así como programar su envío a una determinada hora y desde cualquier lugar (algo especialmente útil para los profesores). Además, la plataforma pone a disposición de los padres un buen número de ofertas en servicios educativos, como librerías, logopedas o academias de enseñanza.

La descarga de TokApp School es gratuita, bajo licencia de uso para centros educativos. Actualmente está disponible para las plataformas móviles Android, iOS y Windows Phone y, en menos de dos años de vida, ya se ha implantado en 43 ciudades españolas. Según ha reconocido su fundador, el objetivo es superar las 200 a finales de 2015.