Educación

Casi el 70% del gasto educativo es para pagar a profesores

Educación cree que «no se ha invertido bien»: el dinero ha ido a sueldos y a bajar los alumnos por aula

Unos estudiantes en la protesta de ayer frente al Ministerio de Educación
Unos estudiantes en la protesta de ayer frente al Ministerio de Educaciónlarazon

Tenemos profesores que figuran entre los mejor pagados de Europa aunque imparten más horas de clase que nuestros vecinos europeos; la media de alumnos por profesor también es baja (12 estudiantes por docente) y los alumnos españoles tienen más deberes y más horas de clase. Además, el gasto en Educación se ha incrementado en los últimos años hasta alcanzar el 4,5% del PIB y el desembolso por alumno llega a los 7.861 euros al año en los centros públicos, una cifra que supera la de la Unión Europea (6.829 euros). Con estos datos sobre la mesa, ¿qué está fallando en la educación para que los estudiantes españoles tengan tan bajo rendimiento? La secretaria de Estado de Educación, Montserrat Gomendio, daba ayer respuesta en Brasil a esta pregunta en la Conferencia de Alto Nivel sobre la Evaluación de las Competencias de Adultos (Piacc), organizada por la OCDE. «Se ha invertido mucho dinero... pero no se ha hecho bien», sentenció. «La mayor parte de la inversión se ha desviado a reducir el ratio alumno-profesor y a mejorar el salario de los profesores... Aunque la inversión se ha duplicado en la última década, no ha sido eficiente y no se ven resultados satisfactorios», dijo en declaraciones recogidas por Ep. Los datos de los que dispone el Ministerio de Educación constatan que si en el año 2006 el 66,6% que el gasto público en Educación iba a parar a profesores, en el año 2011 suponía ya el 68,5 por ciento.

Según la OCDE, el salario de los docentes es hasta un 40 por ciento más alto en España con respecto a otros profesionales de similar nivel de cualificación, mientras que en el resto de países ganan un once por ciento menos.

En la última década también ha aumentado el número de profesores que han accedido a las aulas con el fin de evitar clases masificadas de alumnos. Así,si en el curso 2002-2003 había 405.686 en centros públicos, en el curso 2012-2013 se registraron 474.993, según los datos que maneja el Ministerio de Educación. Así, a día de hoy podemos afirmar que en el último curso, la ratio de alumnos por profesor era de 12 alumnos, una cifra que sigue por debajo de la Unión Europea. En el conjunto de la Educación Primaria y Secundaria, la cifra desciende hasta los 11,4 alumnos por profesor, muy lejos de países como Finlandia (13,3), Francia (14,4) o alemania (15,7). «El rendimiento de los estudiantes es bajo porque se ha puesto poca atención al hecho de cuánto aprendeny falta rendición de cuentas y transparencia en el sistema, algo que introducirá la nueva reforma educativa que se empieza a aplicar a partir del próximo curso académico», explicó ayer Ismael Sanz, director nacional de Evaluación Educativa.

La reflexión de la secretaria de Estado de Educación en Brasil sobre el sueldo de los profesores españoles coincidió con el día en que se retomaba la negociación colectiva del tan demandado Estaduto Docente, una reivindicación histórica, lo que no sentó bien a los sindicatos. «Tenemos entre los bomberos a un pirómano. Sus declaraciones la descalifican», lamentó Adrián Vivas, presidente de CSIF. «Sus palabras han sido muy desafortunadas y el debate genera una polémica estéril que no ayuda en nada», añadió Nicolás Fernández, presidente del sindicato de profesores ANPE.

El sindicato Fete-UGT pidió ayer incluso la dimisión de Gomendio. «Es cierto que comenzamos nuestra carrera profesional con una media salarial alta, de unos 1.800 euros, pero tras toda una vida dedicada a la enseñanza, acabamos cobrando unos 2.100 euros. En el resto de país europeos comienzan su trayectoria profesional con unos 1.500 euros de sueldo y acaban ganando al cabo de los años unos 2.700», explicó Carlos Cortiñas, secretario general del sindicato. Al margen de la polémica, la reunión de los sindicatos con representantes del Ministerio acabó con el compromiso de que el acceso a la profesión docente, por la vía del concurso-oposición, no será un aspecto a negociar independientemente, sino que es una parte más de lo que será el estatuto docente que contempla otros capítulos muy importantes para los profesores como la carrera profesional y su promoción y los derechos y deberes de estos profesionales (en este capítulo se incluirá el reconocimiento del profesor como autoridad pública y se regulará la jubilación). De ahí que la prueba de idiomas que quiere implantar el Ministerio en las oposiciones y la acreditación de conocimientos digitales por parte de los futuros maestros puede que tarde años en exigirse, vaticinó el presidente de ANPE. El sindicato pidió la eliminación de la tasa de reposición de efectivos, la elaboración urgente de un decreto de plantillas que elabore las especialidades docentes, la derogación del decreto14/12 de ajustes del gasto educativo y la disposición de una jubilación anticipada vinculada a la aplicación de la Lomce. El presidente de CSIF, Adrián Vivas, no ocultó, sin embargo, su «decepción porque no hemos avanzado nada. El Ministerio se ha enrocado en el acceso a la docencia, en poner en marcha medidas que no cuestan dinero».

Los rectores piden el fin de los recortes

La Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE) ha acordado la redacción de un manifiesto exigiendo el fin de las «medidas urgentes de racionalización del gasto educativo» aprobadas hace dos años. En el texto que algunos rectores leerán hoy miércoles a las 12:00 y otros harán público a través de sus páginas web se hace hincapié en que, «ante las afirmaciones de una perspectiva de mejoría económica en España, nos vemos en la obligación de pedir la supresión de las medidas excepcionales que vayan más allá de un ahorro racional y una gestión eficiente y austera».

Dentro de estas medidas que se solicitan, uno de los rectores que se ha adherido al manifiesto, Fernando Suárez, de la Universidad Rey Juan Carlos, aboga por la «necesidad de recuperar la posibilidad de activar plazas de profesores y aumentar la tasa de reposición de los mismos». Además, en el campo económico, pide que «se aumente la financiación y se finalice con estos recortes notables», que también han tenido su impacto en los estudiantes con «la reducción de las becas y la subida de tasas». El rector de la Universidad Rey Juan Carlos, Fernando Suárez Bilbao, también mostró su preocupación sobre que los recortes, que se anunciaron como de «carácter excepcional», tengan «continuidad en el tiempo». Suárez Bilbao recordó que el llamamiento se hace «de cara a la estructuración del curso que viene» y que ignora si con este manifiesto se logrará cambiar la situación actual que se vive en Educación, pero «es su ilusión».