Rusia pide una investigación sobre la llegada de EE UU a la Luna

Una investigación internacional debería ponerse en marcha para aclarar varios detalles oscuros que rodean a los alunizajes de EE UU entre 1969 y 1972, según explicó Vladimir Markin, portavoz del Comité de Investigación ruso el pasado martes en una columna del periódico "Izvestia". Markin argumentó que las autoridades estadounidenses habían cruzado la línea al ordenar una investigación sobre corrupción a gran escala contra nueve funcionarios de la FIFA. El escándalo provocó la dimisión del presidente de la FIFA, Joseph Blatter, el 2 de junio y ha generado un acalorado debate sobre el papel de Rusia como anfitrión de la Copa Mundial 2018, infoma "The Moscow Times".

Según las palabras del portavoz "los fiscales estadounidenses se implicaron a sí mismos después de haberse entrometido en los asuntos internacionales de fútbol". Markin propuso que estos mismos investigadores internacionales examinaran algunos de los elementos más turbios del pasado de América.

Así, dijo, una investigación internacional podría ayudar a resolver el misterio de la desaparición de material fílmico original de la llegada del hombe a la Luna en 1969 o explicar por qué los casi 400 kilos de roca lunar obtenidos durante varias misiones entre 1969 y 1972 se han esfumado.

"No estamos afirmando que ellos no volaron [a la luna], simplemente grabaron una película sobre el alunizaje importante para los científicos pero también a nivel cultural. Son parte del legado de la humanidad y su desaparición sin dejar rastro es una pérdida para todos. Una investigación debería revelar lo que sucedió", escribió Markin.

La agencia espacial estadounidense NASA admitió en 2009 que las grabaciones originales del primer alunizaje habían sido borradas, pero dijo que habían conseguido remasterizar la emisión de televisión original del aterrizaje, según informó Reuters. De los aproximadamente 380 kilos de roca lunar dice que se han obtenido durante tripulados alunizajes estadounidenses, la mayor parte se almacena en el Lyndon B. Johnson Space Center en Texas, aunque se pueden ver muestras en exposiciones de varios museos de todo el mundo.