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Primer ensayo de Manel Navarro en Kiev: ¿Mejorar algunas cosas? Todas

Ensayo de Manel Navarro en Kiev
Ensayo de Manel Navarro en Kievlarazon

Con un decorado de palmeras, tablas de surf y una camiseta florida, más que representar a nuestro país, parece que estemos ante un españolito por el mundo que se ha perdido en Jamaica

Tras el subidón después del primer ensayo en el escenario del Centro de Exposiciones de Kiev, donde se celebrará Eurovisión el próximo sábado, Manel Navarro ha sido muy generoso consigo mismo. «Tenemos que mejorar algunas cosas» ha afirmado. ¿Algunas? Muchas, incluso demasiadas si no se quiere pasar por el certamen como alma en pena por mucho que la canción y la puesta en escena intenten reflejar la alegría de España, su «modernidad y juventud, además de simbolizar la libertad», dice el director de la puesta en escena así, directamente, sin anestesia. Con un decorado de palmeras, tablas de surf y una camiseta florida, más que representar a nuestro país, parece que estemos ante un españolito por el mundo que se ha perdido en Jamaica. Ni las portadas de los discos de Café del Mar -uno de los lugares más visitados en Ibiza- son tan... ¿almibaradas? La visión de una especie de planeta rojo -que parece que está inspirado en los mapas de temperaturas para señalar dónde hace más calor- subsana el resultado. Se pretende dar una imagen desenfadada de nuestro país que lo único que provoca es enfado además de exacerbar el sentido del ridículo ajeno. Prometen para el próximo domingo, en la segunda prueba, modificar las luces, poner más planos cortos y cambiar el plano cenital cuando surfea aunque se teme que afronta no una ola, un tsunami eurovisivo en toda regla.

Del tema «Do it for your lover» ya se sabe lo que esperar, pero en bueno de Navarro se lo está currando, no tanto en el tema artístico como en la intención de hacerse con el público. Se ha tatuado la palabra «música» en ucraniano. Pues muy bien... pero es un guiño que no da puntos, salvo que se infecte el tatuaje.