Ferrán Sancho: «La clave para estar entre los mejores es aprender de los que lideran»

La Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) ha conseguido, a pesar de los limitados recursos financieros, colocarse entre las cuatro mejores universidades españolas, de acuerdo con el prestigioso ranking de Shangái. Ha remontado casi cien puestos en sólo un año. Curiosamente, es el tiempo que lleva Ferrán Sancho como rector del centro.

–¿Cómo es posible que, en un año, su centro haya pasado a convertirse en la mejor universidad española?

–Siempre aparece, entre las universidades españolas, en las primeras posiciones de los rankings. Lo cual prueba que su actividad es de primer nivel. Ocupar la primera posición en España atestigua el buen trabajo desarrollado de forma regular y sistemática.

–¿Cuáles son los secretos para estar en lo más alto?

–No revelo ningún secreto si afirmo que la clave es aprender, aprender y aprender de los que han demostrado ser líderes. Buscar la calidad sin tregua, responder a las necesidades del servicio público con la ilusión del primer día, y no desfallecer ante la adversidad.

–¿La crisis está relacionada con que algunas universidades, como la de Vigo, se hayan descolgado del «top 500»?

–Los efectos de la crisis (entendida en nuestro caso como reducción drástica de recursos para la ciencia) se percibirá más a medio plazo, cuando por culpa de los recortes en investigación (por el Ministerio) y en subvención (por las CC AA) se puede perder la dinámica de mejora continua que tanto ha costado conseguir. La desinversión que se está realizando en educación superior tendrá costes elevados para la sociedad.

–¿Qué requisitos debe recoger un centro que quiera formar parte de este «top»?

–Trabajar con proyectos a medio y largo plazo que posibiliten una plataforma científica estable; disponer de la financiación suficiente que permita ejecutar esos planes; extender la internacionalización...

–¿Cree que el nuevo decreto de becas va a provocar que muchos jóvenes no puedan permitirse estudiar en la Universidad?

–Sí, va a ser así, aunque a las autoridades no les guste oírlo ni que se les recuerde.

–¿Por dónde cree que debería comenzar la reforma universitaria?

–La verdadera reforma debería descansar en un plan económico estable que permita desarrollar proyectos científicos sin estar pendientes, cada año, de la aprobación de los presupuestos. Debería dar a las universidades la verdadera autonomía que tienen sus competidoras europeas.

–Está usted pasando unos días en EE UU, ¿está tomando nota de alguna idea?

–Siempre se captan ideas, aunque a veces percibes la distancia astronómica entre los recursos de que disponen las universidades punteras en EE UU y los de las universidades punteras en España, como la UAB. Para que se haga el lector una idea, la UAB es del mismo tamaño en número de estudiantes y profesores que la Universidad de Berkeley, en California, que también es pública. Este centro tiene, aproximadamente, 10 veces el presupuesto de la UAB. Es francamente difícil competir internacionalmente en estas condiciones de precariedad financiera.