El 65,6% rechaza la medicina alternativa

El 55% no cree que los tratamientos complementarios puedan sustituir a las prácticas de los médicos.

Acupresión, acupuntura, homeopatía, meditación, osteopatía. Son solo algunas de las múltiples terapias alternativas a las que muchos enfermos suelen recurrir en nuestro país. Las técnicas alternativas y las terapias naturales engloban un conjunto de prácticas orientadas a la mejora de la salud, pero que no se encuentran catalogadas como parte de la medicina convencional occidental. El paso de los años ha supuesto el aumento del nivel de aceptación de algunos de estos tratamientos. Han ido cosechando una gran popularidad e incluso muchas ya se aplican como terapias complementarias siendo aplicadas, en muchas ocasiones, por los centros médicos convencionales. Pese a ello, la eficacia terapéutica de muchas de las técnicas no está demostrada y la comunidad médica se opone tajantemente a algunas.

Por ello, es preciso preguntarse, ¿son útiles para los pacientes?

El aumento del número de seguidores de las terapias alternativas no ha conseguido convencer a buena parte de los españoles, ya que un 55 por ciento de la ciudadanía no cree que puedan sustituir a los tratamientos médicos. Hay quienes piensan que estos cuidados deberían estar sometidos a una mayor vigilancia. Para el 74,5 por ciento de los encuestados, el Ministerio de Sanidad debe aumentar el control sobre la pseudociencia, siendo los mayores de 55 años quienes más apoyan esta propuesta, un 78,3 por ciento. La población conoce estos métodos, sin embargo un 65,6 por ciento de los españoles nunca ha recurrido a ellos, a pesar de que a un 40,6 por ciento no le parecen peligrosos.