El duro caso de la joven con anorexia que saca los colores a Sanidad

Alexandra, enferma desde los 13 años, es un triste ejemplo de la falta de recursos y de unidades especializadas.

La anorexia y la bulimia se ha convertido en grave problema. Según la Asociación contra la Anorexia y la Bulimia (ACAB), unas 26.000 chicas padecen este tipo de trastornos, lo que supone el 6 por ciento de la población femenina joven. Otros 2.000 chicos han desarrollado también alguna de estas enfermedades. Los trastornos de conducta alimentaria suponen la tercera enfermedad crónica en la población de entre 15 y 29 años. Se calcula que el 11,5 por ciento de las jóvenes tienen un riesgo elevado de padecerla.

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Sin embargo a pesar de estos alarmantes datos aún queda mucho camino que recorrer en lo que asistencia sanitaria se refiere. Esto es lo que ha puesto de manifiesto Patricia Cervera, una madre andaluza ha echado mano de Change.org para reclamar unidades especializadas en Trastornos de la Conducta Alimentaria, es decir, un lugar donde den una atención integral a personas con anorexia y bulimia. Una petición para la que no ha dudado en hacer públicas unas durísimas imágenes de su hija para concienciar sobre la gravedad de este trastorno y la necesidad de destinarle muchos más recursos. También ha puesto en marcha el hastag #TratemosLaAnorexia, un grito desesperado para que no se cierren las puertas a este tipo de pacientes.

La hija de Patricia Cervera lleva enferma desde los 13 años y asegura que le ha pedido que “la deje morir” pero ella no piensa dejar de luchar. Alexandra, que tiene 21 años y pesa 31 kilos, esta siendo atendida en un hospital de Ciudad Real ante la falta de recursos en Andalucia, que no cuenta con una unidad especializada para tratar esta enfermedad.

En Ciudad Real y lejos de su madre, Alexandra -que no responde al tratamiento ambulatorio- afronta ahora un duro camino hacia su curación, según relató ella misma a Telecinco. Muchas personas se ha hecho eco de la situación de esta joven y se han solidarizado con la iniciativa.

Esta no es la primera vez que se denuncian este tipo de situaciones. En 2017, otra madre, Sonia Nistal, también ponía en marcha una campaña en Change.org para salvar a su hija y denunciar que a veces los tratamiento contra la anorexia se quedan a medias.

En su petición, Sonia denunciaba que "El Hospital Niño Jesús es el único centro público de Madrid que cuenta con una UTCA (Unidad de trastornos de comportamiento alimenticio), así que acuden a él todos los niños de la comunidad con este problema y muchos de otras comunidades autónomas. Existen otros centros con unidades de psiquiatría infantil en los que tratan casos agudos de todo tipo de enfermedades, pero en esos hospitales no puedes recibir un tratamiento específico para un trastorno alimenticio. Y en el Niño Jesús están tan saturados que no pueden responder a tiempo ni con el tratamiento que una persona con anorexia necesita".

Existen otras unidades, como la del hospital Universitario Santa Cristina, pero las familias insisten en la falta de medios para casos graves y prolongados.

Desde las asociaciones urgen a Gobierno y Comunidades Autónomas a destinar muchos más recursos a este tipo de patologías en la que los adolescentes son los más vulnerables.