Gijón

El presunto homicida tenía tres denuncias por malos tratos

El hombre, J.A.B.M., detenido esta madrugada en Gijón por prender fuego a la vivienda en la que se encontraban su ex mujer y sus dos hijos de 14 y 2 años de edad, al negársele la entrada en el domicilio, había sido denunciado por malos tratos en tres ocasiones en noviembre y diciembre de 2013 y en enero de 2014, según han informado a Europa Press fuentes cercanas a la investigación. Además le constan 12 detenciones por robo y hurtos. Está previsto que el detenido pase este viernes a disposición judicial, según han informado las mismas fuentes. Los hechos ocurrieron a las 00:20 horas de esta madrugada se recibió una llamada en las dependencias de la Policía Local de Gijón en la que un vecino de un edificio de la calle Alonso de Ojeda, alertaba de una explosión en la escalera del mismo, que había originado una gran cantidad de humo que se extendía por todo el inmueble.

Al llegar dos vehículos patrulla al lugar, comprobaron la presencia de gran cantidad de humo a la vez que la puerta de una de las viviendas del piso tercero se encontraba ardiendo, procediendo a apagar el fuego con los extintores de dotación. En la vivienda se encontraba una mujer, que les abrió la puerta en ese primer momento, y sus dos hijos de 14 y 2 años, que tuvieron que ser atendidos por los servicios médicos que se trasladaron al lugar debido a la inhalación de humo y que decidieron su traslado al Hospital de Cabueñes.

La madre pudo informar a los agentes que su expareja se había personado momentos antes en el domicilio y como no le había abierto la puerta le había amenazado con prenderle fuego al edificio, indicando, que acto seguido sintió una explosión y comenzó a entrar gran cantidad de humo en la vivienda. La mujer facilitó a los agentes la filiación y las características físicas de su expareja. Sobre la 1.10 horas, el presunto autor de los hechos fue localizado en las inmediaciones caminando hacia el lugar de los hechos, por una patrulla de la Policía Local de Gijón, que procedió a su detención. En el cacheo de seguridad al que fue sometido se le intervinieron un juego de llaves del domicilio donde se encontraba su ex pareja y los niños, un teléfono móvil que pertenecía a la mujer y que según manifestó se lo había quitado para que no pudiese llamar a la Policía y un mechero.