El retrato-robot del sospechoso de raptar a «Maddie» fue descartado hace cinco años

El retrato-robot hecho público por Scotland Yard hace dos semanas de un sospechoso en la desaparición de Madeleine McCann del Praia da Luz en 2007 fue descartado por los investigadores hace cinco años, según informa el diario británico "Dailymail"en su versión digital. Varios testigos situaron a este hombre, de 20 a 40 años, cerca de la urbanización en la que residían los McCann, con un niño en brazos. El primero de los testimonios correspondía al de Martin Smith y su familia, de origen irlandés, que indicaron a la Policía que habían visto al sospechoso sobre las 22:00 horas. Sin embargo, una mujer que conoció a los McCann durante las vacaciones, situó la escena a las 21:15 horas, lo que significaba que había un desfase horario con la investigación original que había que esclarecer. Los investigadores privados ya pusieron en entredicho la versión de los amigos de la familia de "Maddie"y concluyeron que los tiempos de los que hablaban no cuadraban con dicha versión. De hecho, uno de los investigadores mostró su sorpresa al ver el retrato-robot en la televisión cinco años después de que fuera descartado.

Meses después de la desaparición y después de ver a Gerry McCann en la televisión, Smith dijo a la Policía que creía que el hombre al que vio llevando una niña de tres años en brazos le recordaba al padre de Madeleine. Después de investigar las coartadas, la policía portuguesa dijo oficialmente que los McCann no eran sospechosos de la desaparición de su hija. Numerosos testigos dejaron claron que Gerry estaba en su complejo de vacaciones en el momento se produjo el avistamiento. Posteriormente los padres de "Maddie"demandaron a la familia Smith y tuvieron que ser indemnizados por difamación.
La Policía portuguesa reabrió el caso la semana pasada, después de que la Fiscalía lo autorizada ante la existencia de evidencias suficientes para hacerlo. La decisión se tomó varios días después de que la ministra del Interior británica y altos cargos policiales se reunieran con las autoridades portuguesas para presionar para la reapertura de la investigación.