Fotógrafos con la infancia

La fundación Balia organiza por tercer año una subasta solidaria de fotografía, la más importante de España en este campo, con el objetivo de recaudar fondos para ayudar a los menores en riesgo de exclusión social. Una veintena de artistas de reconocido prestigio han cedido sus obras, por las que se podrá pujar el lunes en el Museo Thyssen-Bornemisza.

Como dijo el presidente John Fitzgerald Kenneddy, los niños son el recurso más importante del mundo y la mejor esperanza para el futuro. En el ámbito nacional, la fundación Balia lleva este concepto marcado en su ADN. Balia significa en sánscrito «desarrollo de la infancia», y en eso trabaja esta fundación desde el 2001, desarrollando programas para favorecer la inclusión social de menores en desventaja. Para poder implementarlos y llegar a un mayor número –la UE alerta de que el 40% de los menores en España vive por debajo del umbral de la pobreza–, Balia desde hace tres años organiza una subasta benéfica «Fotógrafos con la Infancia», que se ha convertido en la subasta fotográfica más importante de España.

El próximo lunes, en el Museo Nacional Thyssen-Bornemisza, se subastarán 20 fotografías cedidas por artistas reconocidos, entre las que destacan las de varios premios nacionales de fotografía, como Joan Fontcuberta, Chema Madoz, Alberto García-Alix e Isabel Muñoz. Además, este año colaboran también con la subasta la española ganadora del premio «Carte Blanche», Anna Malagrida, y la fotoperiodista, Joanna Biarnés. Por otro lado, se subastará una fotografía única de Cristina Iglesias y obras emblemáticas de Carmen Ballvé, Dionisio González, Jordi Bernadó, Leopoldo Pomés y Txomin Badiola, así como de los internacionales Boris Savelev, Geert Goiris, Gonzalo Lebrija, Jack Pierson, José Dávila, Massimo Vitali, Miguel Rothschild y Sally Man.

Aquellas personas que deseen asistir a la subasta y pujar por las obras, podrán adquirir su entrada por 35 euros en Ticketea, que incluye un cóctel del catering Medems y el acceso a la exposición temporal «Sonia Delaunay. Arte,diseño y moda». Además, para aquellos que quieran colaborar con la actividad solidaria se pondrá a la venta una Fila 0, también en Ticketea.

El objetivo de esta tercera edición de la subasta «Fotógrafos con la Infancia», puesta en macha por la presidenta de honor y cofundadora de Balia, María Entrecanales, es superar la recaudación de las ediciones pasadas. Los 200.000 euros conseguidos en ambos eventos se destinaron íntegramente a los programas educativos que Fundación Balia desarrolla en España. En su primera edición, la Subasta Benéfica de Balia obtuvo el premio al mejor evento de captación por parte de una ONG de la Asociación Española de Fundraising. Sólo una obra, la de Alberto García Alix, superó en más de 11.000 euros el precio de salida. En 2015, la obra de Hiroshi Sugimoti alcanzó los 26.000 euros, convirtiéndose en la venta más cara de fotografía contemporánea subastada en España. También estuvieron muy disputadas las obras de William Klein, Lucas Foglia y Utah Barth.

Si bien el objetivo principal de este tipo de actos es la recaudación de fondos para los niños en riesgo de exclusión social, no debe perderse tampoco de vista la oportunidad que ofrece de adquirir obras de arte a un precio más asequible, cuando por lo general sólo están reservadas para los bolsillos más holgados. Para hacer el arte más accesible a todos, el pintor César Galicia ha cedido un lote fuera de subasta, con una tirada de 60 ejemplares, que se podrán obtener a partir de 250 euros.

Pero no sólo eso. No debe perderse de vista que las obras cedidas por estos artistas para los programas de la fundación Balia salen a subasta a un precio muy inferior a los de galería. Por ejemplo, la obra de Massimo Vitali, titulada «Back Stage Devo», tiene un precio de salida en la puja de 9.000 euros, cuando un comprador tendría que desembolsar 30.000 euros en condiciones normales.

Porque la función social del arte no es sólo la educación cultural, sino también la de beneficencia. Algo que tiene muy claro María Entrecanales, que ha logrado convertir «Fotógrafos con la Infancia» en algo más que una subasta: «Que sirva para que cada uno de nosotros nos miremos dentro y nos preguntemos cómo podemos ser más generosos. La historia nos demuestra que los seres humanos somos más generosos en situaciones de emergencia, que esto no se quede en un acto solidario más al que asistir», desea su cofundadora.

La fundación Balia atiende alrededor de 5.000 usuarios, la mayoría niños en situación social de desventaja. Uno de sus principales ejes de acción es la lucha contra la pobreza infantil, ya que como ellos mismos recuerdan en España hay aproximadamente 2,8 millones de niños en riesgo de padecerla. No obstante, tal y como recuerdó su presidenta de honor en la edición pasada, cuando la fundación inició su camino en 2001 la pobreza infantil no era un hecho reconocido: «Había quien preguntaba si realmente existía la pobreza infantil». Lo que dijo, pone de manifiesto que es un problema que va más allá, ya que no sólo se traslada a la vida de los niños que viven en una situación precaria, sino a toda la sociedad, lo que puede crear «mentes poco saludables que son una amenaza clara para nuestra sociedad». Así, para atajar esta lacra siempre es de agradacer eventos como esta subasta, donde aquellos con más recursos aportan grandes sumas de dinero a causas solidarias. «Es una manera consciente de colaborar por una sociedad más justa y equilibrada», reconoció Entrecanales.