Desapariciones

La madre, en contacto diario con su hija menor

Su abogado niega que Diana fuera «vulnerable» a su lado. «La relación entre ambas era perfecta»

La Razón
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Con vistas a centrar todos sus esfuerzos en el regreso de Diana, sus padres, Juan Carlos Quer y Diana López-Pinel, han reiterado su intención de no airear los problemas familiares del pasado. De hecho, el abogado de López-Pinel, Pedro Víctor de Bernardo, afirmó ayer a LA RAZÓN que «no vamos a hacer valoraciones» de las declaraciones realizadas por Quer. Con todo, reiteró que «la relación de Diana con su madre era perfecta. Ni era problemática, ni ella estaba vulnerable».

Estas afirmaciones llegan un día después de la entrevista concedida por Quer a «Espejo Público». Entonces, el padre afirmó que, el pasado verano, mientras compartía sus vacaciones con sus hijas, había percibido que, en los últimos tiempos, el clima que compartían las jóvenes con la madre «era de tensión y crispación. No estaban pasando por su mejor momento».

Su representante legal extiende esta buena relación de López-Pinel a su hija pequeña, Valeria. Precisamente ayer, la madre regresó a Madrid, donde tiene su residencia. Sobre la posibilidad de que vea durante estos días a su hija pequeña, cuya custodia recayó en su padre Juan Carlos, Pedro Víctor de Bernardo explicó que «mantiene contacto con ella todos los días». Con todo, López-Pinel ha tomado la determinación de declarar ante el Juzgado de Instrucción número 2 de Ribeira, que fue el que le retiró la custodia, para dar su versión e intentar convencer al juez de que la menor está protegida bajo su techo. Aún así, el abogado cree que aún es demasiado pronto para confirmar si presentarán un recurso a este cambio de tutela. «Primero debe declarar», reiteró De Bernardo. Algo que solicitará posiblemente hoy.

Sobre su estado anímico, el abogado explicó que López-Pinel «se encuentra mal. Y cada día que pasa, peor». Y es que, pese a mantener un contacto diario con las autoridades, no recibe noticias que apunten claramente al paradero de la joven. «No ve ni un sólo punto de luz. Nada que sea positivo. Cada día, la desesperanza es mayor», aseguró.