Sucesos

Las policía busca en los desagües más víctimas del jardinero asesino de Toronto

Bruce McArthur ocultó los restos de seis personas en macetas

Bruce McArthur, el asesino
Bruce McArthur, el asesinolarazon

La Policía de Toronto decidió excavar el desagüe de la propiedad en la que se han encontrado los restos de seis personas presuntamente asesinadas por Bruce McArthur, un jardinero que atacaba a personas de la comunidad gay de la mayor ciudad canadiense.

La decisión de buscar restos humanos en el desagüe de la propiedad, situada en uno de los barrios del norte de Toronto, se produce una vez que el lunes se dio por concluida la excavación del terreno.

La Policía decidió excavar en partes del terreno tras descubrir los restos de seis personas ocultos en macetas de grandes dimensiones situadas dentro de la propiedad.

McArthur, de 66 años, utilizaba el jardín y una caseta situada en ese terreno para almacenar el equipo que empleaba en su negocio.

La propiedad pertenece a un matrimonio que había cedido el uso del terreno y la caseta a McArthur a cambio de que realizase de forma gratuita trabajos en su jardín.

El jardinero fue detenido el pasado 18 de enero como parte de una investigación centrada en la desaparición de personas en el barrio gay de Toronto, y acusado de la muerte de dos individuos, Selim Esen, de 44 años, y Andrew Kinsman, de 49 años.

Días después, la Policía le acusó también de la muerte de Majeed Kayhan, de 58 años, Soroush Mahmudi, de 50 años, y Dean Lisowick, de 47.

Pero a principios de diciembre la Policía de Toronto dijo que había descubierto los restos de seis personas ocultos en macetas de McArthur y que estaban almacenadas en un terreno del norte de Toronto.

La Policía teme que McArthur sea responsable de la muerte de más personas, por lo que ha decidido buscar más restos humanos en el desagüe de la propiedad así como en otros inmuebles relacionados con el jardinero.

Las tareas de búsqueda de restos se están viendo ralentizadas por las condiciones meteorológicas, ya que las bajas temperaturas invernales en Toronto mantienen el suelo congelado, lo que impide realizar excavaciones con normalidad.

Efe