Galicia

Localizan en el río Ulla (La Coruña) el cuerpo de un concejal holandés

La Guardia Civil ha hallado muerto a un concejal holandés, de origen gallego, y sobre el que había una orden de búsqueda por parte de las autoridades holandesas por supuestos delitos económicos, según ha confirmado la Benemérita. Su cuerpo fue recuperado a última hora de la tarde de este lunes en aguas del río Ulla después de que el fallecido, Ramón Smits Alvarez, concejal del Partido del Trabajo de Amersfoort (Utrecht) alertase, a través de una llamada al 062, de su intención de suicidarse.

El edil, de unos 40 años y cuya madre reside en Carballo (A Coruña), estaba desaparecido desde hacía 12 días. Supuestamente, habría dejado una carta avisando de sus intenciones. En su llamada al 062 explicó donde se encontraba, por lo que al lugar, en Ponta Ulla, en el municipio coruñés de Vedra, se desplazaron dotaciones de la Guardia Civil que no pudieron evitar que consumase su decisión. También lo hicieron efectivos de Bomberos de A Estrada y de Protección Civil, que participaron en el operativo de rescate del cuerpo.

La policía investiga todas las hipótesis. Hace una semana, en un programa de la televisión local, el alcalde de Amersfoort hizo un llamamiento para que, en caso de que le estuviese escuchando, recapacitase y regresase.

Tenía muy meditado lo que iba a hacer. Se fue con su pasaporte y con 4.000 euros. Dejó su móvil y una nota a su mujer, con la que tiene dos hijos. También quiso despedirse a su manera en Twitter y le envió un mensaje a un amigo.

Desde el primer momento, se sospechó que podría haberse desplazado a Galicia. Principalmente a Carballo, donde tiene una casa familiar en Vilar de Uz (Oza), y un piso en la calle de la Estrela de Carballo. Una tía, hermana de su madre y residente precisamente en Oza, indicó a "La Voz de Galicia"que durante el fin de semana visitaron e inspeccionaron el piso, pero no advirtieron ningún cambio. Ramón tiene muchos amigos y conocidos en Galicia, especialmente vinculados al Partido Socialista, y confían en que esté con alguno de ellos, agarrándose a la esperanza de que no le hubiera pasado nada. La noticia cogió por sorpresa y desconcertó a sus compañeros socialistas de Carballo, con los que mantenía una relación cordial. Smits visitaba con frecuencia Carballoy la última vez que se le vio en el municipio fue a finales de agosto.