Los desafíos más peligrosos y populares

La Ballena Azul: Similar a un juego de rol en el que cada participante afronta 50 retos –cortarse los labios, situarse al borde de un precipicio– durante 50 días. El último es el suicidio.

No Lackin Challenge: Dos jugadores muestran sus respectivas armas y se apuntan mutuamente a la cabeza, a muy pocos metros y durante varios segundos, sin llegar a apretar el gatillo. Un tercero graba la escena.

Hot Water Challenge: La contraposición al popular «Ice Bucket Challenge». Consiste en verterse agua hirviendo sobre el rostro y sacudirse en el suelo de dolor, provocando así graves quemaduras a quienes realizan este reto.

Tide Pod Challenge: Invita a comer cápsulas de detergente.

Hielo y sal: El reto está en exhibir quién aguanta más las quemaduras que provoca la reacción físico química de esta mezcla sobre la piel.

Desafío 48 horas: Los chicos desaparecen durante dos días y gana aquél cuya ausencia genera más alarma en las redes sociales.

El Abecedario del Diablo: El niño recita el abecedario completo mientras otro le araña la piel hasta dejarla en carne viva.

Reto del condón: Los jóvenes introducen un preservativo por la nariz y lo expulsan por la boca.

Fire Challenge: Consiste en rociarse el cuerpo con una sustancia inflamable y prender con un mechero.

Knock Out: Una persona se aproxima sigilosamente a otra, escogida al azar, y la empuja con violencia.

Balconing: Muy popular en la costa española. Es el salto desde una ventana de hotel a la piscina.