Más de la mitad de los hogares monoparentales con niños, en riesgo de pobreza

Manuela Macías tiene 52 años. «Tengo dos hijos a mi cargo. Mi situación económica es desastrosa, no tengo trabajo y sólo tengo la pensión que me pasa mi marido: 300 euros al mes. Mi presupuesto diario es de cuatro euros y medio. Con ese dinero tengo que pagar piso, agua, luz, colegios...». Esta madre no puede evitar emocionarse al narrar su situación. Su testimonio es uno de los elegidos por Save te Children para denunciar la situación que viven los hogares monoparentales en nuestro país. Especialmente los encabezados por una mujer, y que constituyen ocho de cada diez.

Un estudio presentado por la ONG, titulado «Más solas que nunca», desvela que la tasa de pobreza en los niños que viven en estos hogares es de un 54%, 12,5 puntos más que el conjunto de la población infantil. Y el doble que el total de la población. Además, el 65% de las mujeres al frente de estos hogares asegura tener dificultades para llegar a fin de mes, lo que supone 10 puntos por encima del resto de hogares. Como recordaron durante la presentación del informe, son unos datos que coinciden con las recientes encuestas del INE.

Andrés Conde, director general de Save the Children, señaló que en nuestro país hay más de 1,75 millones de hogares monoparentales, la mayoría encabezados por mujeres. «Estas madres tienen que hacer frente sin ayuda a todas las responsabilidades familiares. En su situación se hace muy difícil conciliar la vida familiar y laboral. Las políticas por sí solas son insuficientes si no van acompañadas de medidas sociales concretas que permitan y favorezcan la conciliación y el cuidado adecuado de los hijos», afirmó.

En el estudio se detalla que sólo un 48,6% de estas madres tiene empleo, frente al 70% de los hogares con hijos en los que al menos un progenitor tiene trabajo. Tres de cada cuatro de estas mujeres ha tenido que reducir gastos fijos de casa y el 37,8% no puede mantener el hogar a la temperatura adecuada. Además, el 25% de las madres manifiesta que ha dejado de comprar medicinas o de seguir un tratamiento médico por no poder afrontar los costes.

Ana Sastre, directora de Sensibilización y Políticas de Infancia de Save the Children, considera positivas medidas como la anunciada en marzo por el Gobierno, que extenderá la ayuda de 1.200 euros anuales a estos hogares. Sin embargo, «es insuficiente». Por eso, la ONG reclama al Gobierno central y a las administraciones públicas una serie de medidas concretas. Entre otras, ampliar la deducción por maternidad para madres solas en riesgo de exclusión social con hijos menores de 3 años, independientemente de que la madre trabaje o no; incrementar la prestación por hijo a cargo hasta los 150 euros; proteger a los niños frente a los desahucios y considerar a estas familias como colectivos beneficiarios de ayudas al alquiler; crear una prestación por maternidad no contributiva para aquellas madres en activo sin recursos que no hayan trabajado nunca, y ampliar el permiso de maternidad hasta un año, manteniendo la retribución salarial completa.