Cartagena
Científicos constatan la recuperación del Mar Menor
El descenso de la clorofila y la turbidez a valores mínimos permite una visibilidad de hasta cuatro metros de profundidad.
El descenso de la clorofila y la turbidez a valores mínimos permite una visibilidad de hasta cuatro metros de profundidad.
Los últimos estudios científicos tomados en las aguas del Mar Menor constatan «la transparencia y claridad» de la zona como síntomas de su recuperación. La laguna, una de las zonas naturales más mediáticas de toda España, en los últimos años ha visto cómo su situación ha mantenido en vilo a la población murciana, que desde hace meses comienzan a apreciar cambios sistemáticos en su regeneración y recuperación, mejorando así una de las oportunidades turísticas más demandadas de la comunidad costera.
La laguna de agua salada se caracteriza por ser un ecosistema único incluido en el convenio Ramsar de humedales de importancia internacional. Por ello, el Gobierno murciano ha priorizado su regeneración ante el gran carácter ambiental y turístico que supone.
Durante años se han llevado a cabo diversos estudios junto a la comunidad científica con el fin de resolver sus problemas invirtiendo en dicho entorno natural más de cien millones de euros, principalmente, en actuaciones de saneamiento y depuración evitando el vertido urbano.
Si bien es cierto que el pasado verano la zona vivió uno de los momentos más críticos de los últimos años, esto hizo que se activaran las alarmas buscando soluciones al revertimiento del aumento de fitoplancton.
Fue entonces cuando la prioridad de los agentes implicados se centró en evitar cualquier tipo de vertido a la laguna, donde se precisó la colaboración de las entidades afectadas, las administraciones y los sectores productivos. Un esfuerzo «fundamental» que permitió alcanzar el «vertido cero» en agosto del pasado año con el sellado por parte de la Confederación Hidrográfica del Segura de conducciones de desagüe en el campo de Cartagena.
Desde entonces, la Comunidad ha puesto en marcha diferentes dispositivos de mejora que cuentan con el trabajo de diferentes colectivos de expertos encargados de realizar un seguimiento del estado permanente de la laguna. El Mar Menor cuenta con un Comité de asesoramiento científico que, además, la pasada semana constató los síntomas de evolución de las aguas, «mostrando claros síntomas de recuperación en cuanto al funcionamiento biológico y de las comunidades bentónicas, es decir, del conjunto de organismos que pueblan el fondo marino».
Según los profesionales, dicha mejora queda patente por el descenso de los niveles de clorofila y turbidez, actualmente «en valores mínimos», y cuyo índice sigue bajando desde el pasado agosto de 2016. «La transparencia media del agua también se ha recuperado, ya se ha pasado de observar alrededor de un metro el verano pasado a cuatro metros de media actualmente».
Además, Salud Pública realiza semanalmente diversos análisis del estado de las aguas y las playas marmenorenses que, según los últimos datos, indican que son «excelentes» según los parámetros establecidos por ley.
Investigaciones
El Mar Menor es la masa de agua más investigada y controlada de España. Los diferentes grupos de trabajo científicos centran su atención en el estado de sus aguas. Durante este año se están ejecutando 1,7 millones en más de una quincena de trabajos que son «la base para contar con el conocimiento científico necesario para la recuperación total de este espacio natural», y compatibilizarlo asimismo con la actividad de los diferentes sectores productivos.
Uno de los proyectos del Gobierno murciano es, además, mostrar la mayor transparencia en cuanto a la información que se da a los ciudadanos. Con la creación de un Comité de participación social del Mar Menor, el portal regional pretende «dar voz a toda la sociedad» para mostrar todos los trabajos y aportaciones para su recuperación.
Además, también se han puesto en marcha diferentes iniciativas para que sean los propios ciudadanos de la Región de Murcia quienes den buena cuenta de la situación de mejora de la laguna salada, tanto a pie de playa como a través de los nueve clubes náuticos.
Paralelamente, también se aprobó recientemente un Decreto Ley de medidas urgentes para garantizar la sostenibilidad ambiental en dicho entorno. Su objetivo es «contribuir a compatibilizar la actividad agraria con la protección del entorno ambiental».
El fin de la alerta roja en el Mar Menor
Los mapas muestran un ejemplo claro y evidente de los síntomas de recuperación de la laguna salada de la Región. A través de las imágenes del Servidor de Datos Científicos del Mar Menor, se pueden observar los puntos calientes en los que la falta de transparencia del agua hacía estar en «alerta roja». Arriba, puede observarse cómo en 2016 los niveles eran de riesgo, mientras que en el de abajo, de 2017, los parámetros muestran unos tonos azul «en calma».
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