Ocho detenidos por cuatro robos violentos en varias ciudades

La Policía Nacional, en colaboración con los Mossos d'Esquadra, ha detenido a ocho integrantes de un grupo criminal al que se atribuyen cuatro robos violentos en distintas ciudades españolas.

La Policía Nacional, en colaboración con los Mossos d'Esquadra, ha detenido a ocho integrantes de un grupo criminal al que se atribuyen cuatro robos violentos en distintas ciudades españolas.

Los arrestados alquilaban pisos con documentación falsa en los que citaban a sus víctimas con pretextos, como arrendar una vivienda o realizar una operación de compraventa de droga, para después asaltarlas, amenazarlas con armas y dejarlas amordazadas en el interior, según una nota de la Policía Nacional.

Uno de los miembros del grupo hacía de señuelo y los acompañaba hasta el domicilio, momento en el que irrumpía el resto de la banda.

A los ocho detenidos, se les imputan delitos de detención ilegal, lesiones y tenencia ilícita de armas.

Las investigaciones comenzaron el pasado diciembre tras tener conocimiento de un robo con violencia e intimidación cometido en un domicilio de la avenida Ausias Marc de Valencia, donde al parecer se iba a cerrar una operación de compraventa de un kilogramo de cocaína.

Los agentes comprobaron que dos hombres y una mujer de origen colombiano se dirigieron a la vivienda en cuyo interior fueron abordados por tres hombres encapuchados, dos de ellos con pistola, que los obligaron a tirarse al suelo, les cubrieron la cabeza con unas toallas, los ataron de pies y manos y se apoderaron de unos 400 euros.

Además, constataron que la mujer que acompañaba a las víctimas estaba en connivencia con los autores del asalto y, con posterioridad, averiguaron que el domicilio había sido alquilado por un hombre que facilitó una identidad falsa.

A partir de esta información se hicieron indagaciones para descubrir la verdadera identidad del arrendatario, dato que finalmente se obtuvo.

También se comprobó que este sujeto estaba siendo investigado por los Mossos d'Esquadra por su participación en dos atracos en domicilios de la ciudad condal, por lo que se inició una investigación conjunta.

El primero de estos atracos tuvo lugar en Barcelona el 10 de septiembre del pasado año, cuando un matrimonio había quedado con un hombre en un domicilio para cerrar la operación de compra del inmueble.

Una vez dentro fueron abordados por varios encapuchados, uno de los cuales portaba un arma, y, tras amordazarlos, se apoderaron de 18.000 euros y varios efectos, abandonaron el lugar y les dejaron unas tijeras para que se pudieran desatar.

El segundo atraco ocurrió un mes después, cuando dos hombres se dirigieron a una vivienda de la ciudad condal acompañados por un tercero de origen sudamericano, para gestionar un alquiler.

Ya en el interior, fueron abordados por cuatro hombres encapuchados, uno de los cuales llevaba una pistola.

En los tres robos el "modus operandi"fue el mismo, ya que las víctimas habían contactado previamente con una persona que las acompañaba a los domicilios con la excusa de cerrar una operación.

El intermediario, que estaba en connivencia con los autores del asalto, abría los inmuebles con su llave y una vez en el interior eran abordadas por varios hombres encapuchados y con armas de fuego, que las ataban y se apoderaban de los efectos.

En los dos asaltos de Barcelona el "gancho"era de carácter inmobiliario, mientras que en el caso de Valencia era cerrar una operación de compraventa de estupefaciente.

Los agentes averiguaron la identidad de los sospechosos y que habían alquilado un coche en Barcelona y una vivienda en el distrito de Marítimo de Valencia.

Días después los policías también supieron que tenían alquilado otro piso en Gijón (Asturias) y se habían desplazado a éste desde Barcelona, motivo por el que se estableció un dispositivo que llevó a la detención de siete personas, una mujer y seis hombres.

Tras los arrestos se les intervino una mochila con dos armas cortas, una defensa eléctrica, pasamontañas, guantes, gorros, cuerdas y una careta.

Con posterioridad a las detenciones se realizaron cinco registros en domicilios de Cornellá (Barcelona) y fue detenida otra mujer.