¿Por qué se toma menos cocaína?

¿Qué ha contribuido en el descenso del consumo de cocaína?

– Antes de 2007 se produjo un crecimiento espectacular. Esta droga estaba centrada en el «glamour», la «gente guapa». Pero de ahí, descendió al mundo de los jóvenes, la fiesta, la noche. Como todo arranque, tuvo un aumento brutal y que situó a España en la cabeza del consumo de cocaína. Este descenso es fruto de un gran trabajo de concienciación social, la labor de los medios de comunicación, las charlas en los colegios... Antes, la gente creía que la única droga era la heroína. Además, la cocaína tiene un silencio clínico importante. Gracias a ese trabajo, se ha ido reduciendo.

El único punto negativo que veo es que la gente piense que el problema ha terminado, cuando la edad de inicio en esta droga está en los 15 años.

¿La crisis ha influido en esta disminución?

–La influencia de la crisis va a condicionar consumos, en un sentido y en otro. ¿Que la crisis ha tenido que ver? Posiblemente. Ahora bien, el paro juvenil, por ejemplo, ¿tiene algún tipo de incidencia? Si la gente no tiene expectativas de futuro es más fácil caer en determinadas conductas. Ahora bien, no es lo mismo hablar de consumo esporádico que de adicciones. La drogodependencia es una enfermedad muy seria.

¿Qué sector de la población está más expuesto a caer en el consumo?

– Los consumos están vinculados a un estilo de vida. Y el porcentaje mayoritario de su consumo está relacionado con el tiempo libre. Deberíamos ser capaces de reducir los horarios de diversión. Es casi imposible estar de marcha nueve horas con los amigos y no consumir. Cuando escuchamos que se ha celebrado una fiesta en Ibiza de varias horas, en seguida pensamos en la cocaína. En estos casos, las drogas se convierten en elementos complementarios. Hemos visto que el contexto de estas drogas lúdicas vinculadas al tiempo libre se ha abierto. Pero también que la percepción del riesgo por parte de la sociedad es más alta.