Alimentación

Evitar el tabaco y el alcohol y comer verdura y pescado, claves contra la disfunción eréctil

No consumir tabaco y alcohol, comer pescado azul y verduras y realizar ejercicio durante 30 minutos, como natación o footing, son actividades que pueden ayudar a paliar los efectos de los excesos navideños en la salud sexual y evitar la disfunción eréctil.

En este sentido, José Benítez, director Médico de Boston Medical Group, especializado en las disfunciones sexuales masculinas, recuerda que la salud sexual es un reflejo de cómo se encuentra el sistema vascular y, en general, el organismo. "Los excesos en Navidad son prácticamente inevitables, pero podemos adoptar unos hábitos de vida saludables, incluso en estas fechas, que eviten los factores de riesgo que predisponen a los hombres a padecer disfunción eréctil", asegura.

En cuanto a la alimentación, este experto recuerda que mientras que una comida habitual suele rondar las 800 kcal., en el caso de una cena de Nochebuena o Nochevieja supera las 2.000. Por ello, recomienda que en estas comidas se incluyan pescados azules (salmón, atún o pez espada), ricos en ácido omega-3, que produce prostaglandinas, moléculas con acción vasodilatadora que previenen la formación de coágulos y trombos, y alimentos con una alta concentración en nitrato, como el apio o las espinacas.

El alcohol, en cambio, es un producto a limitar ya que produce en los varones una interrupción de la erección, independientemente de la dosis tomada, ya que inhibe el buen funcionamiento del sistema nervioso central y afecta al sistema vascular implicado en la erección. Por ello, recomiendan un máximo de dos copas.

Lo mismo sucede con el tabaco, segunda causa tras el alcohol implicada en los trastornos de disfunción eréctil entre los varones menores de 35 años. Esto es debido a la progresiva obstrucción que provoca en las venas y las arterias. Además, en pacientes fumadores la circulación sanguínea se ve reducida en las arterias peneanas debido a sustancias como la nicotina y, como consecuencia, experimenta una menor respuesta a los estímulos que provocan la erección.

Para contrarrestar los excesos, este experto recomienda 30 minutos de natación o de footing o símplemente caminar ya que favorecen el buen funcionamiento del sistema circulatorio. Además, recuerda que practicar es otra arma para prevenir la disfunción eréctil, ya que acelera el ritmo cardiaco de una forma sana y mejora el estado general de las arterias.

En cualquier caso, el doctor Benítez recuerda la importancia de acudir cuanto antes al especialista una vez se ha presentado el problema, para minimizar el impacto en el organismo e iniciar un tratamiento adecuado lo antes posible, "facilitando así una recuperación más rápida y sencilla".