Indemnizan con 764.000 euros a una mujer que perdió sus extremidades por un mal diagnóstico

El Juzgado de 1ª Instancia nº 44 de Barcelona ha condenado a la compañía aseguradora Zurich a indemnizar con 764.691 Euros a una paciente de 64 años de edad que, tras sufrir un proceso infeccioso no tratado correctamente, tuvo que ser sometida a la amputación de las 4 extremidades. Además la Aseguradora tendrá que abonar 13.605 Euros a cada uno de sus cincos hijos en concepto de daños morales.

Los hechos se remontan al 16 de Noviembre de 2010, cuando la paciente acudió al Servicio de Urgencias del Hospital Municipal de Badalona por un dolor abdominal tipo cólico. Allí, se le realizón una radiografía, que reflejaba la presencia de un cálculo situado en el trayecto de la vía urinaria derecha que no fue detectada. Sin embargo esta fue erróneamente interpretada y se le dio el alta. Al día siguiente, la paciente regresó al hospital en situación de hipotensión por una grave infección urinaria (sepsis de origen urinario) y pese a realizar una analítica que informa de un shock séptico no se estudia el origen de la infección mediante prueba diagnóstica ni se cambia el antibiótico, según indica la Defensora del Paciente en un comunicado. Aún así, se mantiene a la paciente en el área de observación al tratarse de un Hospital que carece de UCI, y que no cuenta durante la noche con urólogo, radiólogo y ecógrafo. No se traslada a la paciente a otro Hospital ante la carencia de medios para tratarla ni se le informa de la gravedad de su estado. Ante la mala evolución de la paciente, con inicio de necrosis en las extremidades y fallo multiorgánico, se procedió a consultar por teléfono a otro Hospital, que señala la necesidad de realizar una ecografía que da con el diagnóstico: obstrucción de la vía urinaria que requiere el traslado urgente a otro hospital.

A su ingreso es traslada, con carácter urgente, a quirófano eliminar el foco infeccioso mediante descompresión de la obstrucción de la litiasis sacra (calculo), aumentando las dosis de noradrenalina (fármaco necesario para aumentar la presión sanguínea) con remisión posterior a UCI donde presento una arritmia ventricular e insuficiencia respiratoria aguda, insuficiencia renal, insuficiencia hepática e isquemia periférica que derivo en la amputación de las manos y los pies.