«Te mando 20 dólares para que te recuperes»

MADRID- Lucía Ruiz, de 11 años y de origen norteamericano, viajaba con sus tíos en el último vagón del Alvia accidentado en Santiago de Compostela, uno de los más afectados por el descarrilamiento. Sufrió fracturas en las piernas, el cráneo, la pelvis, la cadera y una hemorragia interna.

Veinte días después de haber sobrevivido a la tragedia en la que perdieron la vida 79 personas, lucha en una habitación de un hospital a apenas dos kilómetros de la curva mortal, que hizo que su cuerpo fuera rebotando contra las paredes del vagón de cola antes de salir despedida del convoy y quedar sepultada por las maletas, que evitaron que las lesiones fueran aún peores. Sus tíos también sobrevivieron a la catástrofe y permanecen en la unidad de cuidados intensivos. Tras una semana en la UCI, Lucía continúa con su recuperación. Los medicamentos la ayudan a sobrellevar los dolores, pero no consigue conciliar el sueño. La fortuna ha evitado la amputación de sus extremidades inferiores: la necrosis de la pierna izquierda evoluciona bien, pero podría necesitar un implante y la pierna derecha ha respondido bien a la cirugía. El dolor de cadera no le impide ir ganando movilidad día a día y ya ha logrado ponerse en pie para sentarse en una silla para comer y beber en pequeñas cantidades e ir al baño.

Su padre, Ismael Ruiz, está agradecido y preocupado. Agradecido porque su hija fue de las primeras en ser atendidas y preocupado por el futuro de Lucía. «Ella está empezando a preguntar qué implicación van a tener sus lesiones en su vida, en la escuela, en los deportes, en su relación con sus amigos», explicó a la cadena de televisión CBS Chicago. La familia ha creado una página web en Estados Unidos para recaudar fondos con el fin de ayudar con los gastos médicos y poder gestionar cuanto antes su regreso a Deerfield (Illinois), su localidad norteamericana natal.

La historia de esta superviviente ha conmovido a sus vecinos, que en tan sólo una semana han hecho más de 240 donaciones y han doblado el objetivo inicial. Aunque la familia reconoce en la web que no se puede estimar la cantidad que van a precisar para sufragar todos los gastos, la respuesta ciudadana ha superado todas las expectativas. Pretendían reunir 20.000 dólares en 90 días; en apenas una semana, han logrado superar los 40.100 dólares –unos 30.000 euros–.

Pero no sólo quienes conocen a la familia han aportado su granito de arena, sino que las donaciones han llegado de todo el país. El goteo es constante, con aportaciones que van desde los 20 a los 100 dólares y la mayoría de forma anónima. Incluso desde Europa. En el día de ayer, una familia belga aportó 20 dólares con la intención de que la pequeña «regrese pronto a casa» y «piense siempre en positivo». Adam y Wendy Greco han decidido entregar 25 dólares. «Esperamos que Lucía continúe recuperándose». O un hispano de Miami, que cedió 20 dólares para la menor, «para que te recuperes muy pronto. Un abrazo bien grande desde Miami».

Una barbacoa solidaria por Myrta

La familia de la pequeña Lucía no es la única que pide ayuda a través de las redes sociales para intentar recuperar su vida. Las tres hijas de Myrta Fariza y su marido Robert han organizado diferentes propuestas para honrar a «Mama Myrta», como la llamaban sus más allegados. Durante su estancia en el Hospital Clínico de Santiago, su familia se movilizó para recaudar fondos para su recuperación; sin embargo, la mujer estadounidense no superó sus heridas y falleció. Fue la víctima 79. Ahora, sus familiares han preparado una barbacoa para el próximo sábado cuyos fondos están destinados para ayudar tanto a su esposo como a sus hijas.