¿Una ley efectiva?

l ¿Qué riesgos supone para la salud ser fumador pasivo?

–El humo ambiental es el carcinógeno más importante para los no fumadores, estando muy relacionado el riesgo con el tiempo de exposición. En adultos no fumadores expuestos al humo se duplica el riesgo de cáncer de pulmón y son más frecuentes las enfermedades cardiovasculares como la angina de pecho o los infartos. En el caso de los niños es especialmente grave, pues se añade además la aparición de asma, bronquitis aguda, sinusitis y otitis.

l ¿Cómo se puede seguir avanzando en la protección de los no fumadores?

–La ley antitabaco actual es muy buena. No obstante, la prioridad debe ser aumentar la vigilancia y terminar así con los incumplimientos que aún se producen en algunos bares, restaurantes y locales de ocio nocturno de nuestro país, donde se sigue fumando al margen de la ley.

l ¿Qué medidas hay que tomar respecto a los fumadores activos?

–Sería conveniente seguir aumentando los impuestos especiales y el IVA al tabaco, para desincentivar su consumo, así como facilitar toda la asistencia sanitaria posible, financiando los tratamientos para que la gente abandone el tabaco. Además, es vital seguir con las campañas de prevención destinadas a los jóvenes, pues es en esta etapa de la vida cuando empieza a fumar el 80 por ciento de las personas. De hecho, la edad media de inicio al tabaco está actualmente en los 13,5 años.

l ¿Se percibe el verdadero riesgo que entraña el tabaco?

–Aunque hay un conocimiento general de la población de que fumar es malo para la salud, aún hay gente que no es consciente de los riesgos que entraña ser fumador pasivo y estar expuesto al humo contaminado del tabaco.