Spain History X

En «Million Dollar Baby», un tipo con bastantes malas pulgas intentaba hacer carrera con la vida de varios jóvenes dispuestos a dejarse la sangre, el hígado y la manchada saliva por ganar en la lona hasta que la llegada de una joven lo reconcilia de nuevo con el mundo. No hace falta hablar más, porque el cine ama al boxeo, y viceversa. En la película realizada por Zannou, adaptación de la novela homónima de Carlos Bardem, hay también un destartalado gimnasio, un entrenador que en alguna esquina del ring perdió las ganas y el alma y ganó una botella de whisky, un ayudante que asiste impotente al declive del amigo encorvado, un chico recomido de tatuajes que decide al final que la violencia sólo es factible con unos guantes puestos, hombres que intentan ganarse la vida a base de puños pero, además, nazis salvajes siempre a la caza de los débiles que lidera Javier Bardem. Espléndido, feo y siniestro, sobre todo, durante su primera intervención. El cineasta sabe medir las distancias como un buen púgil, sabe amagar el golpe y cuándo soltar la derecha en esta historia de noches y rostros y cristales rotos, de perdedores dispuestos a cambiar sus destinos como sea y de feroces animales que intentan evitarlo y se revuelven para matar al lobo que intenta abandonar la manada (de un día para otro, casi) porque ya no soporta a los suyos ni se soporta a sí mismo. Alguna vez, Zannou echa mano de ciertos tópicos y parece quedarse corto en razones, pero la película consigue oler a sudor, a rabia. Y, también, a cierta moderada esperanza.