Sevilla

Manuel Escribano: «He esperado diez años a que llegara este día»

El sevillano confirmará esta tarde la alternativa de manos de Padilla y Adame con toros de La Palmosilla

Manuel Escribano, el pasado Domingo de Resurrección en Sevilla
Manuel Escribano, el pasado Domingo de Resurrección en Sevillalarazon

La espera se le ha hecho larga a Manuel Escribano. Una década ha tenido que esperar el sevillano para pisar el ruedo de Las Ventas como matador de toros. «Tengo ganas de que llegue la hora para vivir ese momento tan especial, deben ser unas sensaciones diferentes al resto de corridas de toros», relata el torero horas previas a su paseíllo.

Antes de su éxito en la Feria de Abril del año pasado, la situación era diferente. «Las empresas no me atendían y en Madrid no consideraron conveniente darme una oportunidad para confirmar la alternativa», ahora todo ha cambiado, puesto que «cuentan con Manuel Escribano», afirma el matador andaluz. El cambio fue posible gracias a un toro de Miura en Sevilla. «Por fortuna todo salió rodado y a día de hoy me encuentro en el lugar que quería», afirma el de Gerena.

Dos orejas que le hicieron entrar en el circuito de las ferias, pese a ello no quiere encasillarse en este tipo de corridas, ya que su toreo «se adapta a todo tipo de toros, puedo torear templado, por abajo y llevándolo largo», explicó el espada. Esta vez, sus oponentes no pertenecerán a la ganadería de Miura, sino a la de La Palmosilla. «La corrida es honda, baja, y con mucha cara», además, «en el campo me entendí muy bien con su embestida, ahora en la plaza sólo pido que me aguanten», declara Escribano.

Como viene siendo habitual, el sevillano apura en el campo su llega a la ciudad en la que torea. «Aquí sigo con mi preparación física y mental, aparte intento torear más de salón», pero prefiere no ponerse delante de un animal, como hizo la víspera de su gran triunfo en La Maestranza del 2013, «dos días o tres antes de una corrida importante, porque un pisotón o un porrazo puede dejarme fuera», explica el torero.

Importante fue también su paso por Sevilla, tres tardes que sirvieron a Escribano. «La gente vio un torero en ascenso, con proyección, además pudieron ver a un torero que sabe torear despacio», concluye el de Gerena.